La Policía Nacional mantiene activa la búsqueda de un individuo al que consideran un ladrón oportunista tras protagonizar un inédito episodio en Fuengirola.
Según informó Diario Sur, el hombre fue captado por las cámaras de seguridad acercándose al cadáver de un joven de 25 años, que acababa de ser tiroteado junto a un club de cannabis en diciembre de 2024, para arrebatarle la riñonera que portaba.
El hecho ocurrió apenas segundos después del crimen, mientras la víctima yacía en el suelo tras ser acribillada con un fusil de asalto.
La investigación principal, dirigida por la Udyco-Costa del Sol en colaboración con las autoridades holandesas, permitió esclarecer rápidamente que el asesinato había sido un encargo. En apenas cuatro días, los agentes identificaron al presunto autor, un menor de edad, y a sus cómplices, hasta un total de seis personas implicadas en el crimen.

Vehículo de la Policía Nacional
La magnitud del caso obligó a movilizar todos los recursos policiales, pese a coincidir con el puente de diciembre, cuando gran parte de la brigada de Policía Judicial estaba de descanso.
Mientras el caso avanzaba, las cámaras revelaron la presencia de este segundo individuo, cuya identidad todavía no se ha podido determinar.
La policía sigue trabajando para identificarlo y detenerlo
Las imágenes muestran cómo, tras cubrirse el rostro con la capucha de su sudadera, se acercó al cuerpo para llevarse la riñonera, en la que se sospecha que podría encontrarse la recaudación del club, antes de salir corriendo de la escena.
Pese a que no se descarta cualquier escenario, los investigadores comprobaron que el sujeto había llegado a Fuengirola una hora antes del tiroteo y que no guardaba relación alguna con el asesinato.