“Cuando bajábamos de la cumbre, en la cresta cimera, unos compañeros divisaron más abajo algo de color azul, pensamos que era un casco. Yo me acerqué y vi que era el cadáver de una persona entre la roca y la nieve, totalmente visible. Me emocioné”, relata Jesús Correa, uno de los integrantes del grupo de siete excursionistas del Club Alpí Palamós i Sant Joan que el domingo coronaron el pico Rulhe, de 2.783 metros, en los Pirineos franceses, en el departamento del Ariège. Correa cuenta que la noche del sábado coincidieron en el refugio de Rulhe con la hermana y el cuñado de Txell Fusté, la mujer de Manresa desaparecida el pasado 7 de diciembre en esta montaña junto con Esteve Carbonell. Los familias habían previsto reemprender la búsqueda. El cuerpo podría ser el de Carbonell, extremo que se prevé confirmar una vez avance la investigación y se tengan los resultados de la autopsia, que se prevé realizar el miércoles en Toulouse, según informa Efe.

Txell Fusté y Esteve Carbonell
”Cuando encontré el cadáver, la hermana de Txell me preguntó si la chaqueta era roja, pero no, era de color negro, con capucha. El cuerpo estaba de lado, llevaba una mochila en la espalda con el casco azul enganchado y los guantes también colgados, la ropa estaba desgarrada y no llevaba crampones. Seguimos buscando por la zona, pero solo hallamos unos metros más arriba un palo”, detalla Correa. Eran alrededor de las 12:30, su altímetro marcaba 2.680 metros e inmediatamente llamó a Emergencias, que desviaron la llamada a la Gendarmería, a quienes envió la ubicación y los detalles del hallazgo. “Había previsión de mal tiempo y no esperamos a que llegaran los gendarmes, cuando estábamos en el aparcamiento, hacia las 14:15 horas, empezó a llover”, añade Correa, que subraya que la nieve no cubría ninguna parte del cuerpo.

Punto desde el que los excursionistas divisaron el cuerpo
El grupo acometió el descenso por la ruta habitual de ascenso, por la vertiente norte, siguiendo los consejos del guarda del refugio. Bajaron por una pronunciada pendiente evitando la nieve y sin hallar ningún rastro de Txell Fusté.
El Pelontón de Gendarmería de Alta Montaña de la localidad de Savignac les Ormeaux prevé continuar los trabajos de búsqueda cuando las condiciones meteorológicas lo permitan.
Txell Fusté y Esteve Carbonell, experimentados montañeros, desaparecieron el pasado 7 de diciembre, una jornada en la que irrumpió el torb en este enclave de los Pirineos.