Un bombero ha resultado muerto y otro herido en el vuelco de una autobomba en Espinoso de Compludo (León) en las labores de extinción del incendio de Yeres, en la comarca de Ponferrada, según han informado a EFE fuentes del operativo contra incendios.
El accidente ha ocurrido poco antes de las 22:30 horas de este domingo cuando la autobomba ha caído por un terraplén. El bombero muerto es el conductor de la autobomba y, al igual que su compañero herido, era un miembro del operativo contra incendios y trabajador de la Junta de Castilla y León.
El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, expresó en la red social X su “más sentido pésame y todo el cariño a sus familiares, amigos y compañeros”, así como el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, quien ha mostrado su más sentido pésame a la familia y entorno del bombero forestal fallecido. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado también su pésame por el fallecido y su “deseo de recuperación para la persona que ha resultado herida”, destacando la labor y entrega de los accidentados.
Es la tercera persona que muere en los incendios declarados en la provincia de León y el primer miembro del operativo antincendios de la Junta de Castilla y León que fallece. Hace unos días murieron dos voluntarios, Abel Ramos y Jaime Aparicio, que perdieron la vida al resultar quemados cuando intentaban ayudar a contener las llamas mientras trabajaban con maquinaria pesada entre Nogarejas y Quintana y Congosto.
La triste noticia llega en una jornada negra para la provincia, azotada por los ocho incendios de nivel 2 y los tres de nivel 1 que mantienen a 2.000 personas desalojadas de 60 municipios y pedanías, las más preocupantes las de la zona de Valdeón, en el corazón de Picos de Europa.
El incendio forestal de Yeres/Llamas de Cabrera, en la comarca leonesa de El Bierzo y que ha afectado al paraje natural de Las Médulas, patrimonio de la humanidad, sigue presentando un comportamiento muy agresivo y virulento y cuenta con 120 kilómetros de perímetro, de los que 20 están sin control.
El director técnico del incendio forestal de Yeres/Llamas de Cabrera, Enrique Rey, ha advertido este domingo de la extrema dificultad para contener las llamas de este incendio, que originalmente eran dos fuegos independientes que finalmente unieron su frente de llama tras afectar a Las Médulas y que ha obligado a ordenar el desalojo de otras tres localidades: Saceda, Castrillo y Noceda.
El incendio ya suma 48 horas de comportamientos “anómalos y muy virulentos” y su perímetro alcanza los 120 kilómetros, de los cuales cien están contenidos pero los otros 20 siguen fuera de control. El objetivo prioritario, según ha indicado Rey, es proteger las localidades cercanas y garantizar la seguridad de los equipos de extinción.
En este sentido, se están “buscando oportunidades durante la noche y para mañana” con el fin de ejecutar ataques indirectos que permitan frenar el avance de las llamas. “Queríamos establecer líneas de control, pero el fuego se pasa esas líneas. Eso nos obliga a replantear la estrategia”, ha explicado, al tiempo que ha detallado que la cabeza del incendio se ha desplazado hacia la Maragatería afectando ya a los pueblos de Molinaferrera.
Por su parte, el delegado territorial de la Junta en León, Eduardo Diego, ha calificado este domingo en la provincia de “muy complejo” por los numerosos incendios forestales activos, lo que ha supuesto un despliegue “al límite” del operativo de extinción.
“La climatología no ha acompañado: hemos tenido vientos muy fuertes y variables, que en muchos casos han puesto en riesgo incluso al propio operativo, con brigadas que tuvieron que ser rescatadas”, ha explicado.
Incendios
La climatología no ha acompañado la jornada
El delegado ha señalado como especialmente preocupantes los incendios de Fasgar, Oencia y Barniedo de la Reina, que han obligado a desalojos masivos, incluyendo todo el Valle de Valdeón y varias localidades de la montaña oriental leonesa.
En el caso de Oencia, en El Bierzo, destacó la actuación de una cuadrilla de Medio Ambiente de la Junta que se mantuvo junto a algunos vecinos para proteger el pueblo.
La situación se ha visto agravada por el fuego procedente de otras provincias, como el que entró desde Zamora por la zona de La Baña (Encinedo), o el que avanza desde Ourense hacia Oencia. “A última hora de la tarde hemos tenido una auténtica tormenta de fuego, un vendaval que hacía muy difícil trabajar”, lamentó Diego.
En total, el número de localidades evacuadas ha pasado de 30 por la mañana a más de 60 al cierre de la jornada, con más de 2.000 personas fuera de sus hogares.
Diego pidió a la población máxima prudencia por la baja calidad del aire en gran parte de la provincia y recomendó evitar esfuerzos físicos y usar mascarilla, especialmente en grupos de riesgo.
Además, reiteró la petición de la Junta al Gobierno central para que ponga a disposición del operativo más efectivos de las Fuerzas Armadas.

Bomberos trabajan para extinguir el incendio, a 10 de agosto de 2025, en Molezuelas de la Carballeda, Zamora (España)
“Es una situación de Estado, de país. Necesitamos el apoyo de Defensa para que podamos contribuir a que esta situación mejore”, subrayó tras la visita que el presidente del Gobierno hizo hoy a zonas de incendios en León y en Ourense.
El delegado concluyó agradeciendo el “enorme esfuerzo” del dispositivo contra incendios, que lleva diez días trabajando de manera ininterrumpida en la provincia. “Se están dejando la piel en unas condiciones extremas”, aseguró.