El debate sobre las condiciones laborales en la hostelería vuelve a estar en el punto de mira. Una aspirante a un puesto de cocina ha compartido su experiencia tras acudir a una entrevista que, lejos de ilusionarla, la llevó a rechazar el empleo.
Según su relato, fue citada para una entrevista en la que ni el responsable que la contactó ni el chef se presentaron. En su lugar, una trabajadora de recursos humanos le explicó de manera imprecisa la situación. “Me dicen que solo libran un día, le contesto que si es así no estoy interesada”, recuerda la candidata. La sorpresa fue que la entrevistadora admitió no tener claro el detalle y le pidió que confirmara con otra persona, lo que aumentó la desconfianza de la solicitante. Además, tal y como apuntan en la publicación, el sueldo son 1400 euros.
Más tarde, la conversación continuó por WhatsApp. Allí, el responsable del puesto confirmó lo que ella temía: “Sí, es correcto, descansamos solo un día. Los turnos son de unas 10 horas aproximadamente según el volumen de trabajo”. La respuesta fue tajante: “Uff, no. Gracias”.
La situación refleja uno de los grandes dilemas del sector. Mientras muchos empresarios lamentan la falta de personal cualificado y comprometido, los trabajadores denuncian horarios excesivos, escaso descanso y poca conciliación. Durante la entrevista, la propia responsable de recursos humanos se quejó de la “dificultad para encontrar jóvenes que quieran trabajar y que vivan el proyecto”.
Los turnos son de unas 10 horas aproximadamente según el volumen de trabajo
El testimonio ha generado debate porque muestra la desconexión entre lo que ofrecen algunos negocios y lo que los profesionales consideran condiciones mínimas. Con más de 12 años de experiencia, la aspirante aseguró que rechaza seguir aceptando este tipo de propuestas “aunque la cocina sea mi pasión”.
La precariedad laboral en la hostelería no es nueva, pero cada vez más voces, tanto de trabajadores como de clientes, cuestionan un modelo que exige jornadas maratonianas a cambio de sueldos ajustados y apenas un día libre.