Celebrar la Navidad está íntimamente ligada a reunir la familia entorno a una mesa, con la que compartimos la comida pero también nuestras vivencias. No podemos pensar estas celebraciones sin decorar la mesa de una maneras especial, y más que nunca son mesas inspiradoras y llenas de magia. Es una forma de expresar también nuestro amor a los seres queridos que invitamos en casa. En estas imágenes se muestran tres maneras diferentes de ornamentación.
En la primera de ellas, se han combinado verde con dorados, incluso la vajilla. Concretamente, se ha elegido como mantel una pieza de terciopelo verde adquirido en Ribes y Casals, que contrasta con un original camino de mesa dorado y con flores blancas, de Bossvi. Sin duda las velas rojas dan el toque navideño tan atractivo, colocadas en unos candelabros también dorados de Tartan & Zebra. La vajilla es de Vista Alegre y los vasos, pintados a mano, de la firma VAC (Los Vasos de Agua Clara).
La primera mesa propuesta por Teresa Lloret
En la segunda imagen el rojo es el color protagonista, combinado también con dorados. El centro de la mesa es una Ponsetia alrededor de la cual se han colocado bolas rojas junto con ramas doradas como “atrezzo”, esparcidas a lo largo de la mesa. Todo ello se puede encontrar en Zinnia.
En la segunda imagen el rojo es el color protagonista, combinado también con dorados
Por último se expone una mesa con una fuerte potencia de rojo del mantel y el acebo como centro de mesa. Para contrarrestar este color, se han elegido unos candelabros plateados con velas blancas, proporcionando a la mesa una sosegada vitalidad. La cristalería y la vajilla son de la firma Vista Alegre.
La segunda mesa propuesta por Teresa Lloret
Como se puede apreciar en todas estas mesas se han colocado velas porque no sólo proporcionan un ambiente más cálido y festivo sino que acompañan las largas sobremesas propias de estas fechas. Otra característica común es rojo, que no puede faltar porque es el símbolo del amor que deseamos compartir con nuestras familias y amigos.