Pablo Teipro, divulgador del vino: “Si sigues usando la copa de flauta para el champagne, te estás perdiendo una de las cosas más bonitas, que es poder olerlo”
Visto en redes
El experto asegura que la copa de flauta limita los aromas e impide disfrutar correctamente del champagne
Sofía Atienza, comunicadora especializada en vino: "Hay un tipo de vino que engorda menos, lo primero que tienes que saber es que las calorías vienen del azúcar y del alcohol"
Pablo Teipro, divulgador del vino
El champagne es una de las bebidas más utilizadas en ocasiones festivas como bodas, entrega de premios, Año Nuevo y logros deportivos, puesto que se trata de un símbolo de celebración, lujo y distinción.
Al igual que otras bebidas alcohólicas, el champagne (o champán) suele servirse siempre en el mismo tipo de copa. Este vino espumoso, al igual que la cava o la sidra, se suele servir en una copa de flauta, una copa alta, estrecha y alargada, con una forma de tulipán y una base puntiaguda. Sin embargo, esta costumbre podría tener un aspecto negativo.
Tal y como asegura el divulgador del vino y creador de contenido Pablo Teipro, seguir usando la copa de flauta es todo un error: “Con las copas de flauta te estás perdiendo una de las cosas más bonitas del champán que es poder olerlo” asegura el profesional.
Pablo Teipro: “Si vas a abrir una buena botella, dale la copa que se merece”
Si bien es cierto que las copas de flauta están diseñadas para retener las burbujas y el ácido carbónico, permitiendo que se liberen más despacio y conservando la calidad del vino durante más tiempo, el profesional opta por dejarlas a un lado.
Teipro anima a los amantes del vino espumoso a optar por copas más anchas, las cuales permitirán que el increíble aroma de la bebida llegue a las fosas nasales de la persona que la bebe: “La copa flauta es elegante, sí pero limita los aromas y no deja que disfrutes el champagne como se merece”.