Con la llegada de la primavera, los días se alargan, las temperaturas suben y las comidas se vuelven más frescas y ligeras. Esta es la temporada perfecta para explorar nuevos vinos que mariden perfectamente con la nueva energía de la temporada. Aquí te compartimos algunos consejos para que puedas disfrutar del vino de manera óptima durante la primavera.
1. Elige vinos frescos y afrutados
Primavera es sinónimo de frescura, y los vinos que mejor encajan con esta estación son los frescos, ligeros y afrutados. Los vinos blancos y rosados se destacan por su capacidad de refrescar en los días calurosos, y sus notas frutales combinan perfectamente con las ensaladas, pescados y platos de mariscos que solemos disfrutar en esta época.
Los vinos blancos como el Albariño, Verdejo o Sauvignon Blanc son ideales por su frescura y acidez, mientras que los rosados de variedades como el Garnacha o el Tempranillo son opciones excelentes para acompañar platos ligeros.
2. Aprovecha los vinos espumosos para celebraciones primaverales
La primavera es una época de celebraciones y momentos al aire libre. Los vinos espumosos como el cava, especialmente aquellos de la DO Cava o el Corpinnat, son perfectos para brindar y disfrutar de la frescura y vivacidad que esta estación trae consigo. Además, los espumosos se combinan bien con aperitivos, tapas y platos más ligeros, lo que los hace perfectos para picnics y comidas en jardines.
Apuesta por un cava brut o un rosado espumoso, que ofrecen una sensación refrescante y burbujeante, ideal para las celebraciones primaverales.
3. Apuesta por vinos ligeros para las comidas al aire libre
Los días más largos invitan a disfrutar de las comidas al aire libre, ya sea en un picnic, una parrillada o una comida en la terraza. Para estos momentos, los vinos ligeros son siempre una buena opción. Los vinos tintos ligeros, como el Pinot Noir o el Gamay, ofrecen taninos suaves y aromas frutales que se complementan perfectamente con platos de carne blanca, ensaladas o incluso pizza.
Si prefieres los vinos blancos o rosados, busca opciones con una buena acidez que complementen la frescura de los platos primaverales.
4. Los vinos de guarda para los días especiales
Aunque la primavera invita a vinos frescos y ligeros, también es una excelente temporada para disfrutar de un buen vino de guarda en una ocasión especial. Vinos tintos con una buena crianza, como el Tempranillo de la Rioja o un Cabernet Sauvignon, pueden ser perfectos para una comida más sofisticada, como un asado o un plato de caza.
Aprovecha las temperaturas moderadas de la primavera para disfrutar de estos vinos más complejos, que han madurado en barrica y botella para ofrecer una experiencia sensorial única.
5. Maridar el vino con los platos de temporada
La primavera es la época perfecta para disfrutar de los productos frescos y de temporada, como los espárragos, las fresas, las alcachofas, las verduras de hojas verdes y los pescados frescos. El maridaje correcto realza los sabores tanto del vino como de la comida.
Por ejemplo, los vinos blancos de acidez vibrante, como un Riesling o un Chardonnay, son perfectos para maridar con platos que contienen espárragos o mariscos. Para las fresas o los postres ligeros, un rosado afrutado es una opción refrescante que complementa perfectamente la dulzura de estos ingredientes.
Conclusión: disfruta de la primavera con el vino adecuado
La primavera es una temporada que invita a la renovación, y esto también aplica a la selección de vinos. Opta por vinos frescos, afrutados y ligeros para acompañar las comidas de temporada, pero no dudes en disfrutar de un buen vino de guarda para las ocasiones especiales. Con estos consejos, podrás maridar de manera perfecta tus platos primaverales y disfrutar de la estación con una copa de vino ideal.
Recuerda que el vino no solo es una bebida, sino una experiencia sensorial que mejora con cada elección y maridaje. ¡Aprovecha la primavera para explorar nuevos sabores y descubrir combinaciones sorprendentes!