Muchas personas enfrentan dificultades para estudiar por diversas razones. Identificar la causa es clave para encontrar la mejor solución. Algunas de las causas más comunes son la dificultad para concentrarse, para retener información, falta de motivación o mala organización del tiempo.
Jessie Schwab es una académica especializada en psicología y ciencias del aprendizaje. Actualmente, se desempeña como entrenadora académica en el Centro de Enseñanza y Aprendizaje de la Universidad de Stanford, aplicando su conocimiento en psicología para ayudar a estudiantes a mejorar sus habilidades de aprendizaje y alcanzar sus metas académicas. En uno de sus vídeos más recientes ha dado cinco claves para que nuestro estudio sea más significativo y efectivo.

Biblioteca, libros sobre mesa y fondo para estudiar.
5 pasos para lograr estudiar de manera efectiva
Cinco claves. Schwab afirma que la memorización puede dar la falsa impresión de aprendizaje, pero sin una comprensión profunda, es fácil olvidar la información en poco tiempo. Si eres capaz de seguir estas cinco claves es muy probable que tengas éxito en lo que te propongas:
Crea dificultades deseables. Para aprender de verdad, debes hacer tu estudio activo. En lugar de solo releer tus notas, hazte preguntas, crea mapas mentales, o enseña la materia a otra persona. Estos métodos fomentan una comprensión más profunda y te ayudan a retener la información a largo plazo.

Una chica estudiando
No “empolles”. Aunque te sientas tentado a estudiar todo la noche antes del examen, este método es ineficaz a largo plazo. En su lugar, distribuye tus sesiones de estudio a lo largo del tiempo y revisa regularmente el material. Así, tu cerebro tendrá tiempo para procesar y consolidar la información.
Márcate objetivos SMART. Para mantenerte enfocado y motivado, establece objetivos SMART: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo definido. Por ejemplo, en lugar de “Voy a estudiar biología”, puedes decir “Voy a estudiar el capítulo 3 de biología de 2 a 4pm el miércoles”.

Dividir el estudio por temas es una forma práctica de estudiar y no agobiarse con tanto temario.
Haz pausas y usa el entrelazado (interleaving). Prueba estudiar durante 50 minutos y luego toma un descanso de 5-10 minutos. Además, utiliza la técnica del entrelazado en lugar de estudiar en bloques. Por ejemplo, estudia matemáticas durante 50 minutos, luego cambia a historia por otros 50 minutos. Este método obliga a tu cerebro a estar constantemente activo y adaptándose, lo que mejora la retención.
Buddy System. Trabajar con un compañero de estudio te permite intercambiar ideas, explicar conceptos, y apoyarse mutuamente. Asegúrate de elegir a alguien con tus mismas metas y ambición para que ambos poder beneficiarse de la colaboración.