La expresión “tener la vida solucionada” forma parte del imaginario colectivo. Evoca tranquilidad, ausencia de deudas, libertad para elegir dónde vivir y cómo trabajar, e incluso la posibilidad de retirarse antes de tiempo. Pero ¿qué significa realmente desde una perspectiva económica? ¿Existe una cifra mágica que garantice esa ansiada estabilidad?
La economista Elisabet Ruiz-Dotras, profesora de Estudios de Economía y Empresa en la UOC, desmonta algunos mitos y plantea una visión mucho más realista: la seguridad financiera no nace de un golpe de suerte, sino de la educación financiera, la gestión serena del dinero y la capacidad de priorizar decisiones.
Dejar de lado las emociones
Con la Lotería de Navidad a la vuelta de la esquina, muchos españoles fantasean con la idea de que un premio podría mejorar su vida de manera inmediata. Sin embargo, Ruiz-Dotras recomienda aplicar un principio básico antes de mover un solo euro: pensar con serenidad.
El 72.480 fue el número agraciado con el Gordo del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, dotado con cuatro millones de euros por serie (400.000 euros por décimo),
“Lo primero es dejar que pasen las emociones. Las decisiones financieras no pueden tomarse desde las emociones más extremas de tristeza o alegría”, advierte.
Un premio importante (o cualquier ingreso inesperado) requiere de una revisión calmada del estado económico personal, especialmente si existen deudas. Según la economista, es fundamental analizar si conviene o no cancelarlas, teniendo en cuenta su coste y sus posibles beneficios fiscales.
Educación financiera y asesoramiento profesional
Ruiz-Dotras insiste en un punto que suele olvidarse: no se puede gestionar el dinero sin conocimiento. “A partir de aquí, educarse financieramente y dejarse asesorar por una persona experta acreditada e independiente”, explica.
La economista también desaconseja delegarlo todo por desconocimiento: es necesario comprender conceptos como riesgo, diversificación y horizonte temporal antes de invertir. En definitiva, no hay fórmulas milagrosas: la estabilidad nace del conocimiento, no del azar.
La educación financiera es fundamental para garantizar una buena gestión del dinero.
¿Qué significa realmente 'tener la vida solucionada'? La respuesta, según Ruiz-Dotras, es tan simple como personal: depende de cada individuo. “Depende de lo que signifique ‘solucionar la vida’ para cada persona. Para unos es una vivienda, para otros poderse jubilar, para otros trabajar media jornada…”.
La cifra necesaria tampoco es universal. Varía según el nivel de gasto, la edad, los objetivos vitales y la capacidad de generar ingresos en el futuro. Para algunos, puede ser dejar de preocuparse por los gastos básicos; para otros, financiar un estilo de vida más ambicioso.
Lo que sí parece común es la asociación entre estabilidad y no tener que pensar constantemente en el dinero.
Cada vez son más los expertos que señalan que podemos estar ante el escenario más favorable para la gestión activa.
Alternativas sensatas frente a los impulsos. Cada español gasta unos 75 euros anuales en lotería, aunque hay quienes invierten más esperando que la suerte resuelva todo. Ruiz-Dotras propone un enfoque más práctico:
- Para quienes no ahorran al menos el 20% del salario: redirigir ese dinero a un ahorro sistemático o una cartera diversificada ajustada a su perfil.
- Para quienes ya tienen hábitos sólidos de ahorro: valorar qué compras o experiencias podrían hacer su vida más cómoda o ilusionante.
Al final, la economista lo resume de manera clara: “tener la vida solucionada” no depende de una cantidad fija ni de un golpe de suerte. Es el resultado de: gestionar con calma, evitar decisiones impulsivas, formarse financieramente, pedir asesoramiento profesional o construir hábitos sostenidos.
