La menopausia marca una transición profunda en la vida de muchas mujeres, no solo a nivel hormonal, sino también en la forma en que el cuerpo cambia. Uno de los síntomas más visibles es la acumulación de grasa abdominal. Aunque a primera vista pueda parecer un tema meramente estético, detrás de esta preocupación se esconde una realidad más compleja.
El doctor Alexandre Olmos, en uno de sus últimos vídeos ha hablado sobre la grasa abdominal que aparece en la menopausia: “No es grasa cualquiera, es tejido inflamatorio que produce citoquinas, altera tus hormonas y desregula tu metabolismo. No es estética, es fisiología”, empieza diciendo.
Mujer en menopausia
“No estás acumulando grasa por comer de más, estás entrando en un nuevo entorno hormonal inflamatorio y metabólico”
Cambios. El experto afirma que después de los 40, muchas mujeres notan que aunque coman igual o menos, su cintura se expande: “La mayoría piensa que es cuestión de la edad y es algo mucho más complejo”, comenta.
Una mujer se hace un análisis de sangre hormonal para detectar la menopausia
Explicación. Olmos explica que el tejido adiposo visceral se convierte en un órgano endocrino activo que produce citoquinas inflamatorias que alteran la sensibilidad a la insulina y bloquean la quema de grasa: “Al disminuir los estrógenos se pierde el efecto protector sobre la distribución de grasa. Antes se almacenaba en caderas y muslos, mientras que ahora se acumula en el abdomen, que es metabólicamente más peligroso”, afirma.
El cortisol se eleva crónicamente. La falta de regulación hormonal provoca que los niveles de cortisol se eleven crónicamente, y eso estimula la encina HSD11B1, que transforma cortisona en cortisol dentro del tejido adiposo abdominal, perpetuando el ciclo.
Resultado. El experto señala que todos estos factores hacen que aparezca más grasa, más inflamación y bloqueo metabólico: “No estás acumulando grasa por comer de más, estás entrando en un nuevo entorno hormonal inflamatorio y metabólico. La única forma de revertirlo es con precisión. El cuerpo acumula grasa aunque lo hagas todo bien. No es tu culpa, es tu biología y puedes entenderla”, termina diciendo.

