La educación de los perros no es solo una cuestión de obediencia o de comodidad para sus dueños: se trata de un aspecto esencial para la convivencia, la seguridad y el bienestar animal. Un perro educado no únicamente responde a órdenes básicas, también aprende a relacionarse con su entorno de manera equilibrada, evitando situaciones de riesgo tanto para él como para quienes lo rodean.
Alejandro Flores es entrenador de perros y en uno de los últimos vídeos publicados en su perfil de TikTok ha señalado los tres errores más habituales que cometen los dueños a la hora de educar a sus mascotas.
Una mujer en compañía de su perro
“Si yo exijo a mi perro, va a odiar que lo eduque”
Dirigirse al perro con un lenguaje infantil o frases largas. Para Flores, lo ideal es utilizar órdenes claras y concisas que el animal pueda asociar con acciones concretas: “Es un error hablar a tu mascota como si fuera un bebé si tratas de educarla”, advierte.
Muchos propietarios creen que su perro ya lo hace todo perfecto. El entrenador cree que adelantarse al proceso educativo provoca frustración tanto en el animal como en la persona, y puede llevar a reforzar malos hábitos sin quererlo.
Un perro paseando por un parque lleno de hojas
Exceso de exigencia. Flores critica a los que tratan de imponer disciplina de manera demasiado severa. En su opinión, los gritos o las imposiciones no son necesarios si se cuenta con un buen método de aprendizaje: “Si yo exijo a mi perro, va a odiar que lo eduque. Necesito que lo haga desde el cariño y desde lo positivo”, afirma.
Claves. El entrenador defiende que la clave para lograr resultados es la educación positiva, basada en el refuerzo y la paciencia: “Si tengo un buen sistema educativo, no hace falta ni exigirle no castigarlo”, termina diciendo.

