El príncipe Enrique cree que la presidenta del consejo de administración de Sentebale, Sophie Chandauka, ha actuado de muy mal gusto al invocar la memoria de su madre, la princesa Diana de Gales, tras el duro enfrentamiento entre ellos y después de que él se viera obligado ayer a abandonar esta oenegé africana, que creó junto al príncipe Seeiso de Lesotho y que ayuda a jóvenes de Lesotho y Botswana para continuar la labor de su madre en África.
Mientras Chandauka conservara el control de la organización benéfica que el príncipe creó, una fuente cercana al príncipe Enrique ha asegurado a Daily Mail que está “devastado” por la disputa en la junta directiva que lo obligó a abandonar la organización después de 19 años y acusa a la presidenta de destruir “la obra de su vida”. “Ella está permitiendo que se hunda en llamas debido a su propio orgullo y arrogancia”, ha añadido la fuente.

El príncipe Enrique, Meghan Markle y Sophie Chandauka en el Royal Salute Polo Challenge en Wellington, Florida, en abril del 2024.
Las declaraciones de Chandauka en las que nombra a lady Di llegan en un momento de escalada de tensión. El duque de Sussex y otros fideicomisarios de la oenegé la han abandonado ante la gestión de Chandauka y tras el informe de The Charity Commission que no se posiciona en el conflicto. “A pesar de la reciente turbulencia, siempre estaremos inspirados por la visión de nuestros fundadores, el príncipe Enrique y el príncipe Seeiso, quienes establecieron Sentebale en memoria de sus preciosas madres, la princesa Diana y la reina Mamohato”, comunicó Chandauka mientras la tempestad en Sentebale no da señales de amainar.
Chandauka lanzó graves acusaciones el mes de marzo durante una entrevista televisada acusando al príncipe Enrique de “arrogante” y citando la oenegé como “proyecto vanidoso”, además de acusarlo a él y a otros benefactores de la fundación por “intimidación” y “acoso” para que ella dejara su puesto, según ella, tras un pequeño rifirrafe público en abril de 2024 con la esposa del príncipe, Meghan Markle. Ante el evidente enfrentamiento con la presidenta, Enrique anunció que dejaba de ser benefactor de la organización que fundó en el 2006 con la esperanza de volver cuando el conflicto se resolviera.

Sophie Chandauka en el Royal Salute Polo Challenge en Wellington, Florida, en abril del 2024.
En ese momento fue cuando The Charity Commission, el organismo regulador británico de organizaciones benéficas, avisó de que investigaría lo sucedido, algo que dirimió con su informe esta semana en el que rechaza las acusaciones de acoso y racismo pero igualmente criticaba a ambos bandos por su comportamiento ante la disputa. The Charity Commission llamó a todas las partes a no manifestar sus diferencias públicamente, ya que podrían dañar aún más la reputación de la organización. La organización afirmó esta semana no haber encontrado “ninguna evidencia” de “acoso o intimidación generalizados o sistémicos, incluyendo misoginia o misoginia racial” en Sentebale, pero no criticó la gestión de Chandauka, que seguirá en el cargo.
Ante este panorama, dejó ayer claro tras el informe de la comisión que no tenía intención de regresar como beneficiario de la oenegé, y un portavoz del príncipe dijo: “Con la misión original de Sentebale firmemente en mente, y en honor al legado que él y el Príncipe Seeiso de Lesotho comenzaron, el duque de Sussex ahora se centrará en encontrar nuevas formas de continuar apoyando a los niños de Lesotho y Botswana”.
Sentebale se creó para ayudar a los huérfanos con sida en el empobrecido reino de Lesoto en memoria de su difunta madre, Diana, la anterior princesa de Gales. El nombre significa “no me olvides” en el idioma oficial del país.