¿Un flagrante error o un secreto guardado desde hacía años que ha sido ahora desvelado? esto es lo que se preguntan los británicos sobre la princesa Ana del Reino Unido, el miembro de la familia real más discreto y mejor valorado. Fue el pasado viernes, 15 de agosto, cuando se celebraba el 75.º cumpleaños de la hermana del rey Carlos. Una cifra suficientemente importante como para que la web oficial de la casa real publicara no solo un mensaje de felicitación, sino un escrito con 75 datos significativos de la princesa Ana.
Pero aunque la idea parecía buena, uno de los datos ha sido el que ha levantado la polémica al atribuírsele dos supuestos hijastros, Tom y Amy Laurence. Su segundo esposo, el vicealmirante Timothy Laurence, estaba soltero y sin hijos cuando se casó con ella, el 12 de diciembre de 1992. De ahí que las redes empezaran a arder, y la opinión pública, a preguntarse si se trataba de una equivocación del departamento de comunicación de Buckingham Palace o bien era un secreto que se había desvelado por error.
            La princesa Ana junto a su hermano, el rey Carlos III y detrás su marido Timothy Laurence
Al percatarse de lo ocurrido, el mensaje a modo de homenaje a la princesa Ana fue eliminado de la web rápidamente, sin dar ninguna explicación, pero las capturas de pantalla empezaron a difundirse, y con ellas, los rumores acerca de la posible descendencia secreta de Timothy Laurence (70), fruto de una relación anterior a su matrimonio con la hija de la reina Isabel.
El origen del error sigue sin estar claro, aunque algunos especulan que se debió a datos no verificados introducidos en herramientas de creación de contenido, posiblemente inteligencia artificial, sin una revisión adecuada. Y esto ha planteado dudas acerca de la capacidad de los equipos de comunicación de Buckingham Palace y ha puesto de relieve si están realmente preparados para los nuevos retos tecnológicos, incluida la inteligencia artificial, y parar los posibles deepfakes que puedan afectar a la familia real.
El palacio de Buckingham no ha emitido un comunicado oficial y todo lo que hizo fue sustituirlo con dos nuevas imágenes de Ana, fotografiada por John Swannell, para centrar la atención en su cumpleaños y que la opinión se olvidara del desastre ocurrido.
Este revuelo generado en las redes sociales contrasta con el carácter discreto que siempre ha mantenido la princesa Ana. Se sabe que el viernes, día de su 75.º cumpleaños, lo celebró con su marido, Timothy Laurence, navegando por las islas occidentales de Escocia.
No ha trascendido si en la travesía les acompañaban los dos hijos de Ana: Peter y Zara, nacidos de su matrimonio con el jinete Mark Phillips en 1973, quien, curiosamente, sí tiene otros dos hijos: Felicity (nacida en 1985 de una relación extramatrimonial mientras estaba casado con la princesa Ana) y Stephanie (de su segundo matrimonio).
Peter Phillips (47), el primogénito de la princesa Ana, fue el primer nieto de la reina Isabel. Es economista y hace dos semanas anunció su compromiso con la enfermera Harriet Sperling. Antes estuvo casado con la canadiense Autumn Kelly, con quien tuvo dos hijas Savannah e Isla. En el 2021 firmaron el divorcio. Zara (44) es amazona como sus padres. Está casada desde el 2010 con el jugador de rugby Mike Tindall, son padres de tres hijos Mia, Lena y Lucas.

            
