Tras la conversación entre Putin y Trump del jueves, Budapest sucederá a Alaska como punto de encuentro entre los dos presidentes para discutir un acuerdo de paz en Ucrania. El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, actuará como anfitrión.
El ultraderechista ha sacado pecho con la noticia y ha resaltado que solo su país ofrece un entorno seguro para dicha cumbre. Hungría es el único Estado europeo que apoya la paz. “Si buscaban un lugar seguro desde el punto de vista de la paz, Budapest parece ser una elección lógica”, ha declarado el premier, quien ha asegurado que los preparativos ya han comenzado. Pese a que tanto Trump como Orbán querían fijar una fecha para dentro de dos semanas, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha concretado que podría ser algo más tarde debido a las múltiples cuestiones a resolver previas a la cumbre.
Moscú ya ha dado su aprobación a la reunión, destacando a Hungría como “un país de la OTAN y de la Unión Europea que mantiene una posición especial en relación con su soberanía”. Después de una llamada con Putin, Orbán ha garantizado las condiciones para la organización de la cumbre. “Esto, sin duda, despierta el respeto de ambos líderes”, concluyó Peskov.
Orden de Arresto Internacional
Putin no sería arrestado en Hungría, ya que Orbán se retiró de la CPI
Lo cierto es que la elección de Hungría no es casual, ya que a pesar de ser parte de la UE, el Gobierno de Orbán ha tomado un rumbo muy diferente al del resto de los estados miembros. Hungría ha iniciado los trámites para abandonar la Corte Penal Internacional (CPI), lo que significa que es el único Estado de la Unión Europea donde Putin no se enfrenta a una orden de arresto por crímenes de guerra. Orbán decidió retirarse del tribunal el pasado 2 de junio, cuando recibió al primer ministro israelí Beniamin Netanyahu, también acusado por crímenes de lesa humanidad por la CPI.
El colchón legal que supone Hungría para Putin es una muestra de la estrecha alianza entre Orbán y el Kremlin. A cambio de recursos clave como los hidrocarburos, el premier húngaro actúa como un satélite ruso que observa con escepticismo a la UE y rechaza las sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania., ni siquiera bajo las presiones de Donald Trump y de los países miembros de la OTAN para dejar de adquirir combustible ruso.
La estrecha relación de Viktor Orbán con Vladímir Putin ha deteriorado los vínculos de Hungría con el resto de los Estados miembros de la Unión Europea, adoptando posiciones prorrusas en diversos ámbitos, entre ellos la persecución del colectivo LGBTIQ+, además de haber sido objeto de acusaciones de espionaje a la UE mediante una red de falsos diplomáticos.
Trump respeta a Orbán por su política anti-woke y su defensa de los valores cristianos
En el otro extremo de la negociación, Donald Trump, también se ha consolidado como un aliado de Hungría por su buena relación con Orbán, quien ha seguido algunos de los pasos del líder republicano al pie de la letra. Y también al revés, la política autoritaria del húngaro ha inspirado algunos pasos del movimiento MAGA.
“Queremos a Viktor. Eres fantástico. Creo que no todo el mundo está de acuerdo, pero pienso que es un gran líder”, declaró Trump el lunes durante la firma del acuerdo de paz en la Franja de Gaza. “Le apoyé en las últimas elecciones y ganó por 18 puntos. Espero que lo hagas aún mejor cuando vuelvan a haber elecciones”, concluyó Trump.
La cercanía con el Kremlin no ha impedido a Orbán jugar a dos bandas. El ultraderechista se ha erigido como uno de los principales abanderados de las políticas ‘anti-woke’ y en defensor de los valores cristianos y tradicionales, lo que le ha valido la admiración de Donald Trump.
En la perspectiva de las elecciones parlamentarias de 2026, Orbán presenta esta reunión como un éxito político personal que podría reforzar su base electoral y garantizar su continuidad en el poder. Sin embargo, su partido, Fidesz, atraviesa uno de sus momentos más delicados, con una oposición que ya le supera en los sondeos y amenaza con poner fin a sus quince años de hegemonía política.


