Los primeros cinco días de septiembre el mirador de la torre Glòries reunirá a los embajadores de las 50 torres más emblemáticas del mundo, como la torre Eiffel, el Empire State o la torre Cantón de China, para la 36ª convención anual de la federación mundial de grandes torres.
Con Barcelona de fondo, los representantes de las principales atalayas mundiales intercambiarán las estrategias de sostenibilidad con las que trabajan, la mejoras en las experiencias del visitante y la gestión urbana.
La torre Glòries es una de las recién incorporadas a la federación en 2024 y será la anfitriona de este encuentro internacional en un año en el que se cumple el 20 aniversario del edificio, el tercero de su mirador y el estreno de la plaza que preside. Junto a la torre Collserola, también de Barcelona, son las dos torres españolas incluidas en la federación que nació en 1989.
Para formar parte del selecto grupo los edificios deben poseer la estructura de una torre, disponer de un mirador abierto al público, acumular visitas. La torre Glòries ha alcanzado las 350.000 y, como describe el director de la federación Jean-Yves Ghazi, “no solo deben ofrecer altura, sino también una narrativa clara, una experiencia transformadora y un fuerte vínculo con la ciudad que representan”.
A la convención del año pasado, celebrada en la ciudad de Chongqing en China, asistieron 27 delegados y la temática giraba en torno los cambios en el mercado turístico y cómo incorporar la inteligencia artificial para mejorar el servicio ofrecido.