La división de asuntos internos de los Mossos d’Esquadra investiga a un agente de la policía local de Vila-seca (Tarragona) después de que otra policía del mismo cuerpo y una ciudadana presentasen sendas denuncias por un presunto delito de acoso sexual. El Ayuntamiento de Vila-seca aprobó un decreto de alcaldía el viernes ordenando que al policía investigado se le retirase el arma reglamentaria. Los Mossos comunicaron directamente los hechos al jefe de la policía local de Vila-seca.
El agente bajo sospecha se encuentra de baja laboral, a petición propia, según confirmaron fuentes municipales. El Ayuntamiento de Vila-seca esperará a que los Mossos resuelvan la investigación del caso, avanzado ayer por el medio Porta Enrere, antes de tomar ninguna decisión definitiva.
Los hechos se remontan a principios de agosto. La agente que denunció a su compañero pidió la activación del protocolo por asedio laboral, competencia del Ayuntamiento. El presunto agresor estaba ejerciendo las funciones de jefe del turno de noche cuando intentó agredir sexualmente a una de sus compañeras en los vestuarios de la comisaría. La segunda denunciante es una ciudadana que recibió presuntamente mensajes de carácter sexual del mismo policía local investigado. El agente, que solo lleva tres años en el cuerpo de la policía local de Vila-seca, habría obtenido los datos de la segunda víctima después de haberle puesto una denuncia.