La playa de Altafulla ha recibido 7.000 metros cúbicos de arena procedente de Torredembarra que deben permitir realizar una primera barrera de protección en la escollera de rocas y en el paseo de Tiendas de Mar.
Los trabajos empezaron el lunes con el traslado, desde el martes se están repartiendo por la costa altafullense y se espera que el trabajo esté terminado hacia finales de semana.
Para abril habrá una nueva aportación de arena, también de 7.000 metros cúbicos, que servirá para ganar unos metros de playa en este ámbito más urbano y garantizar la temporada de baño del verano. E
l puerto de Torredembarra ha pagado la extracción y transporte de la arena mientras que el Ayuntamiento de Altafulla sufraga los 30.000 euros que vale el tendido.
La concejala de Medio Ambiente de Altafulla, Alba Muntadas, explica que la actuación nace “de una obligación concesional del puerto de Torredembarra de trasladar arena de la playa de la Paella” del municipio torrenco cuando la playa supera los 140 metros de ancho. Este hecho se produjo y Altafulla reclamó esta arena sobrante pero la situación no se desatascó hasta octubre, cuando se acordó que los 14.000 metros cúbicos se moverían en dos tongadas.
Estos problemas administrativos han hecho que la primera aportación sea ahora a las puertas del invierno. Del consistorio altafullense son conscientes de que no es el mejor momento para realizar estos trabajos ya que es época de temporales fuertes, que en los últimos años han dañado mucho la playa y el paseo. Muntadas valora que al menos ya habrá “una protección” pero reconoce que si llegan las tormentas, buena parte de la arena “va a acabar marchando”.
Este primer grosor se repartirá entre la zona del fortín y la de Tiendas de Mar. La primera debe permitir “hacer un reservorio y asegurar la zona del cordón dunar, que se alargó este octubre”, destaca la concejala. La segunda, debe ayudar a la “defensa de la escollera, que a su tiempo protege las casas” del paseo. En cuanto a la arena que debe llegar el próximo abril, servirá para ganar algún metro en la playa de enfrente Tiendas de Mar, pensando en la llegada de bañistas de Semana Santa y el verano.
Mirar al futuro
De cara al futuro, Altafulla no tiene garantizada la llegada de mayor arena procedente del municipio vecino. Muntadas indica que si el puerto quiere renegociar esta cláusula deberá hacerlo con Ports de la Generalitat. Además, en cualquier caso la arena no tiene porqué ir a Altafulla, sino que se puede trasladar donde sea necesario. “Deberemos ir negociando con Costas del Estado a ver cómo podemos hacerlo, ya la vez trabajar con los reservorios de nuestra playa que nos permita realizar movimientos internos”, destaca.
Asimismo, la concejala apuesta por realizar un proyecto para renaturalizar los dos extremos del paseo de Tiendas de Mar junto con el Estado para incrementar estos reservorios de arena “y mejorar la resiliencia de la playa”.

