Se sabe y se viene analizando desde hace lustros, pero el problema se agudiza año tras año y las soluciones no llegan: la provincia de Alicante sufre un notorio desequilibrio económico entre producción y salarios que se traduce en una renta per cápita inferior a la de otras 43 provincias españolas, cuando se trata de la quinta que más aporta al Producto Interior Bruto nacional.
En la presentación de su trimestral informe de coyuntura económica, el presidente del Instituto de Estudios Económicos de Alicante, Nacho Amirola, recordó que este hecho ha sido planteado antes por el organismo, pero nunca “de una manera tan rotunda”, porque las pensiones medias de jubilación y las bases medias de cotización son unas de las más bajas de España y esto se traduce en ciudadanos con poca capacidad económica para desarrollar su plan de vida.
“Hay que dar prioridad al incremento de la renta per cápita de los ciudadanos”, según el Instituto de Estudios Económicos
Amirola explicó que, “aunque la economía de la provincia de Alicante ha mejorado en los últimos meses, hay que dar prioridad al incremento de la renta per cápita de los ciudadanos”.
Los datos hablan por sí solos: La pensión media por jubilación en junio de 2024 ascendió en Alicante a 1.231,18 euros, lo cual supone ocupar la posición 43 en el ranking nacional, siendo la media española de 1.445,80 euros. Muy alejados de la primera provincia española, Vizcaya, cuya pensión media es de 1.795,85 euros.
Respecto a las bases de cotización media, en junio Alicante mejoró levemente hasta los 1.854,32 euros, lo que permitió al conjunto de cotizantes locales pasar de la posición 49 a la 48. La media española asciende a 2.180,73 euros, y la de la provincia que lidera el ránking, Álava, es de 2.653,79 euros, 800 más que en Alicante.
Para el responsable de Ineca, la clave está en “atraer empresas de mayor valor añadido de sectores industriales y tecnológicos, que posibilitarán, entre otras cosas, ese incremento en la renta”. Esa transformación reduciría la fuga de capital humano con media y alta cualificación, joven en su mayoría, que ya se ha planteado en anteriores estudios.
El instituto plantea tres retos fundamentales que, a juicio de sus analistas, han de ser afrontados para cambiar esta situación. En primer lugar, desarrollar las infraestructuras ferroviarias e hidráulicas que son cruciales para mejorar la competitividad de la provincia. En segundo, poner en marcha un plan de vivienda integral por municipios y, por último, poner suelo industrial a disposición de las empresas para ampliar sus proyectos.
Infraestructuras ferroviarias e hidráulicas, vivienda pública y suelo industrial son los retos más urgentes para la provincia
En el primer caso, Ineca considera de vital importancia “el desarrollo de un cronograma de ejecución de infraestructuras ferroviarias que interconecten a la provincia, sabiendo que es un proyecto que puede prolongarse en el tiempo, pero que debe comenzar por la duplicación del túnel de Torrellano”.
Respecto a la vivienda, el organismo propone “desarrollar programas tendentes a facilitar el acceso real a la vivienda entre la población más joven y de menos recursos, para lo cual habría que disponer de un plan de vivienda pública provincial por distritos municipales”.
Y para el desarrollo de los imprescindibles proyectos industriales que reviertan el empobrecimiento de la masa laboral alicantina, “es necesario apostar de manera mucho más decidida por la generación de más suelo industrial con parques empresariales modernizados, con acceso a suministros tecnológicos y con incentivos reales a la implantación de industrias en la provincia”.