Mónica Oltra no va a esperar a la resolución de los tribunales para decidir su futuro, sea dar un paso para tener mayor protagonismo en el activismo político o, bien al contrario, seguir alejada de los focos y seguir su labor como abogada. Lo afirman fuentes próximas a la exvicepresidenta valenciana, que recuerdan que dimitió de sus cargos institucionales y en Compromís a causa de su imputación en junio de 2022. Lo que añaden es que ha comenzado a trabajar en un discurso propio de la izquierda para “confrontar el relato que está imponiendo la ultraderecha” con voluntad de generar uno propio “alejado de la referencia del PSOE y la construcción de una alternativa real de la izquierda sin caer en el marco de la derecha extrema como sucede ahora”.
Mónica Oltra no va a esperar a la resolución de los tribunales para decidir su futuro
De momento, Oltra ha realizado contadas apariciones públicas, como la protagonizada el pasado 8 de agosto en un acto organizado por Unificación Comunista de España (UCE) en Valencia. Momento en el que lanzó algunas advertencias: “si la izquierda, haciendo un vídeo de TikTok, cree que ya tiene la jornada completa, lo tenemos mal” o “hay que dar la batalla moral a la inmersión fascista”. Añadió también que “todo lo que dice Rufián me parece bien, porque es el único que se sale del molde” en referencia a la idea del diputado de ERC de unir a la izquierda plurinacional.
La exlíder de Compromís está pendiente de la decisión que adopte la Audiencia de Valencia sobre el caso que la afecta a ella y otros 15 trabajadores de la consellería que dirigía por el asunto del presunto encubrimiento de los abusos cometidos por su exmarido sobre una menor. El juez instructor, por segunda vez, ha archivado el caso al entender que “no existe ningún indicio de delito”. Además, la fiscalía, en su calificación provisional, tampoco observa ninguna actitud delictiva en la actuación de Oltra y de su equipo.
La Audiencia de Valencia obligó a seguir la instrucción tras el primer archivo del caso
Pero estas fuentes señalan que no se fían de la Audiencia de Valencia, la misma que obligó seguir la instrucción tras el primer archivo del caso. Fue la orden de la Sección Cuarta de Audiencia Provincial de Valencia, que preside el magistrado Pedro Castellano, que atendió los recursos de la representación legal de la menor (ahora adulta) y de las acusaciones populares de Vox y la asociación ultra Gobierna-te. Tras esa decisión, el instructor reabrió el procedimiento “por imperativo legal” como único fundamento jurídico, en lo que mostraba una clara discrepancia con la instancia judicial superior.
Por eso es importante la decisión de Oltra de plantear su futuro margen de lo que decidan los tribunales. En un momento en el que la izquierda valenciana, y española, está planteando generar complicidades de cara a un nuevo combate electoral, con no pocas crisis de credibilidad y liderazgos, la expectativa de lo que pueda hacer la vicepresidenta genera expectación, también en Compromís, la formación que encabezó durante una década. Al respecto, estas fuentes reconocen que ella está decepcionada con la actitud que tuvo la formación cuando fue imputada. En Compromís conviven dos almas, la de Més Compromís y la de la formación de Oltra, Iniciativa PV. Es esta segunda formación la que más ansía su vuelta a la primera línea política.
Fuentes del Iniciativa, Més e incluso del PSOE reconocen que el perfil de Oltra, más aún si se archiva definitivamente el caso, podría ser clave para la reconstrucción de algunos puentes entre las formaciones de la izquierda valenciana y española. Ella tiene buena relación con dirigentes de Podemos, de Sumar, de fuerzas como ERC y también de IU. Y le atribuyen una “autoridad moral en la izquierda” en un momento en el que las encuestas no son muy favorables para algunas de estas formaciones. De momento ella se mantiene discreta sobre lo que quiere hacer, pero es probable que en breve Oltra vuelva a asumir mayor protagonismo, incluso al margen de los partidos.