Nuestro bienestar es esencial para seguir adelante en el día a día. En una sociedad cada vez más extensa y completa, tanto el cuerpo como la mente deben estar preparados para afrontar cualquier consecuencia. Sin embargo, la cabeza es a menudo un elemento olvidado. Tan pronto como nos despistamos, podemos encontrarnos sintiendo dolor, agotamiento, pulsaciones, ansiedad, nervios y muchas más afectaciones.
Una de las personas más destacadas en España alrededor de esta causa es la psiquiatra Marian Rojas Estapé, actualmente la autora literaria de no ficción más vendida del país. Sus constantes intervenciones aportan reflexiones sobre nuestras acciones y sensaciones, y qué se podría hacer para mejorarlas. Durante una de sus últimas apariciones en plataformas digitales, la madrileña destapó las serias consecuencias psicológicas que afrontan los adictos graves.
“Uno de los síntomas típicos de los adictos graves es que no disfrutan con ningún placer cotidiano. El otro día, un paciente mío está enganchadísimo desde hace un año a la droga, a la cocaína, a diferentes drogas. He intentado que lo deje, pero ha sido curioso, ha sido en el momento en que su hermano, que es de un hermano mellizo al que adora, va a ser padre, le ha dicho que él va a ser el padrino y él nota que cuando su hermano se lo dice a él le da igual, ‘me dio igual’”, detalló.
“Y yo me conozco y sé lo sensible que he sido siempre, y dije que mi hermano me hace padrino de su primer hijo y a mí esto no me da ni un ápice de felicidad, me da igual. Lo sentí como vacío. ¿Qué me está pasando? Y entonces vino a verme y me dijo: ‘ayúdame’. Entonces le dices que cuando tú vives enganchado una droga, los placeres cotidianos, ir a visitar a tu madre, quedar con amigos e ir a ver un partido de fútbol, nada te llena”, insistía.

Marian Rojas Estapé, psiquiatra
Paciencia y consistencia
“Lo único que quieres es estar enganchada a tu droga. Y por eso, si consigues bajar el consumo y entonces esto es súper importante, por eso los psiquiatras de esto tenemos que saber que cada sustancia, desde tabaco, alcohol a videojuegos o a redes sociales, cada uno requiere un tipo de tratamiento y sobre todo muy integral, porque claro, tú les quitas de algo, tienes que introducir a otra cosa porque si no esa persona se siente en el vacío más completo”, remataba.
Estapé también reflexionaba sobre el poder de la mujer para salir adelante: “Convertir el dolor en propósito es una de las mayores fortalezas femeninas. Muchas mujeres encuentran en su experiencia personal una causa que las impulsa y con la que logran transformar su entorno. La fuerza emocional de la mujer no es un cliché, es una realidad respaldada por la neurociencia, la psicología y cientos de historias de supervivencia”.