Una ruptura amorosa es un proceso complicado, porque no solo se le dice adiós a una persona, sino también a la rutina que habían construido juntos y a todos los planes de futuro que habían ideado entre los dos.
Poner punto y final a un vínculo afectivo supone perder una fuente de afecto y apoyo en la que confiabas ciegamente. Por ello, las personas implicadas no solo experimentan una dolorosa sensación de duelo, sino que también se enfrentan a la incertidumbre y la soledad que conlleva la soltería.

Un hombre reflexionando en una ventana
Además, no todas las parejas terminan mediante una conversación honesta en la que ambos se sinceran y deciden romper. En muchas ocasiones, las relaciones acaban con discusiones o explicaciones incompletas, por lo que el vínculo queda en el aire. Más adelante, esta falta de claridad puede generar falsas esperanzas en los involucrados.
En una de sus últimas publicaciones en redes sociales, la psicóloga Alicia González abordó un tema que genera gran interés en su audiencia: las segundas oportunidades románticas. La terapeuta realizó el conocido juego 'preguntas y respuestas' en sus historias de Instagram y un seguidor le preguntó si volver a estar con alguien con quien ya tuviste una relación fallida es realmente posible.

Alicia González, psicóloga
En primer lugar, González expresó que sí es posible, aunque reconoció que no es una tarea fácil. La autora de Parejas mejores señaló que requiere un gran trabajo personal previo: ''Es mucho más complejo de lo que nos gustaría. Ojalá solo con el malestar que experimentamos en la ruptura tuviéramos suficiente para 'aprender' y evitar que se repita aquello que nos llevó hasta ese punto, pero no''.
''El malestar es solo eso, malestar. Si no se hace algo con él, si volvemos solo para calmar lo mal que lo estamos pasando, en una semana volveremos a estar como antes de romper'', señaló la presentadora del pódcast Tal y como somos.
Respeto y empatía
Como conclusión, la amiga y compañera de Elizabeth Clapés explicó que una segunda oportunidad necesita como base fundamental el respeto y que es imprescindible que ambas personas se sienten a dialogar para responsabilizarse de sus actos, establecer acuerdos, reconocerse mutuamente y comprometerse.
En otra publicación reciente, González habló sobre otro aspecto de las relaciones y expresó que, en la actualidad, las personas no valoran lo bueno que tienen porque están constantemente buscando la perfección. En su opinión, deberíamos dejar de buscar desesperadamente un ideal de amor que no existe: ''El amor no siempre brilla, a veces simplemente está. Y eso ya es un milagro por sí mismo. No estoy hablando de conformarse, se trata de aprender a ver lo valioso en lo ordinario''.