Nuestro bienestar es clave para poder afrontar el día a día con relativa normalidad. En una sociedad cada vez más revolucionada en múltiples ámbitos, tanto el cuerpo como la mente deben estar preparados ante los distintos rompecabezas de la jornada. Sin embargo, la mente es un elemento que se tiene poco en cuenta. Tan pronto como nos despistamos, podemos encontrarnos sintiendo dolor, agotamiento, pulsaciones, ansiedad, nervios y muchas más afectaciones.
Sobre esta cuestión, una de las figuras más conocidas por sus declaraciones es Mario Alonso Puig, doctor y fellow en cirugía por la Harvard University Medical School. El madrileño comparte sus conocimientos en entrevistas, conferencias y redes sociales, donde cuenta con millones de seguidores. Una de sus últimas reflexiones se centra en nuestras herramientas para salir adelante, y cómo las tenemos preinstaladas desde un principio.
“Cuando yo estaba plenamente en el mundo de la cirugía, algunas personas hicieron un comentario muy agradable para un médico, que es decir: ‘Medicina, la profesión más importante del mundo’. Y yo recuerdo que decía: ‘No, es la educación’. Se quedaron un poco sorprendidos, ¿cómo es posible? Sí, porque tú con la cirugía puedes cambiar un hecho puntual la patología, tumor, extirpas, bien. Pero es que con la educación puedes cambiar una vida”, comentaba.
“La figura de un profesor que además anhele ser maestro. El profesor enseña una asignatura, el maestro además da claves para vivir. Y todos sabemos la diferencia de tener un profesor y tener un maestro. Entonces, un maestro es una persona que está dispuesta a acompañarte en tu proceso de descubrimiento. Todos sabemos la enorme diferencia que marca, cuando haces frente a un desafío, sentirte acompañado o sentirte solo”, añadía.
Una pared donde apoyarse
“No tiene nada que ver. Incluso biológicamente se sabe. Por ejemplo, si yo estoy haciendo frente a un desafío y tengo miedo, se activa el eje del estrés con una gran liberación de cortisol. Si ante ese mismo desafío me siento acompañado, se libera una hormona de la que llevo muchos años hablando que es la oxitocina. La oxitocina corta el eje del estrés. Entonces, la figura de un maestro es importantísima”, insistía.
“A ver si de una vez por todas nos damos cuenta de la importancia que tiene la educación. ¿Cuántas personas no han mejorado su vida porque encontraron a alguien que tocó su futuro?”, cuestionaba.