En el deporte -profesional y amateur- las roturas del ligamento cruzado anterior han crecido en los últimos años. Esta lesión, sobre todo, afecta a los futbolistas por los gestos y movimientos que realizan y acarrean una pérdida de masa muscular importante tras la operación.
Antonio Pérez, fisioterapeuta, con más de un millón de seguidores en redes, ha explicado por qué ocurre este fenómeno basándose en la última imagen pública de Alphonso Davies, futbolista del Bayern de Múnich que sufrió esta lesión el pasado mes de marzo.
“La respuesta a por qué pierdes tanta muscular es muy interesante”, explica Antonio Pérez en cuatro causas. “La primera la conocemos todos: la atrofia. En el cuerpo, cuando algo no se usa, se pierde. Las fibras musculares que componen al músculo reducen su tamaño debido a la inmovilidad y a la falta de uso”, explica.
“Para que un músculo como el cuádriceps se contraiga y haga fuerza, hay alguien que tiene que darle la orden: nuestro sistema nervioso. Lo que ocurre es que estos receptores que están mirando cómo está el músculo están locos. No hay una buena señal y se altera la función neuromuscular”, detalla el fisioterapeuta.
”La propia inflamación que genera la cirugía dificulta aún más que el sistema nervioso funcione bien”, apunta. “Y por último, la inhibición artrogénica. Imagina que tu rodilla es tu casa, la lesión es una fiesta que organizas y el cuádriceps es ese típico amigo que no quieres que invitar porque sabes que la lía parda”, recurre a una metáfora.
“Lo que ocurre en tu rodilla es que tú no quieres dejar entrar a tu amigo (cuádriceps) a tu casa (rodilla). Es decir, cuando tienes una lesión o una cirugía, la articulación manda señales para que no se active tanto el cuádriceps. Es una especio de protección para que los músculos no puedan generar mucho movimiento y agravar la lesión. Todo esto esto te da como resultado final pérdida de masa muscular y de fuerza”, sentencia Antonio Pérez.