El neurocientífico Jonathan Benito visitaba hacer unas semanas los estudios de la Cadena Ser para charla con la periodista Marta del Vado en el programa La Ventana sobre los efectos científicos y emocionales que tiene la amabilidad en nuestro día a día. Y es que en un mundo cada vez más individualista, impulsado por la irrupción de las nuevas tecnologías, la amabilidad cobra un valor aún más importante, pese a que muchos tienden a pasarla por alto o a relegarla a un segundo plano.
Durante la entrevista con la presentadora, el profesor en la Universidad Autónoma de Madrid y autor del libro El poder de la amabilidad lanzaba una contundente afirmación: ''Desgraciadamente no se puede ser amable con todo el mundo''.
Según el experto, no se puede ser amable con todo el mundo porque efectivamente hay un pequeño porcentaje de personas, ya quitando sociopatías, que eso ya va aparte, pero simplemente personas asociales. ''Para ser un poco neutro. Entonces con esas personas, efectivamente ser amable a veces no es productivo porque incluso ellos pueden ver la amabilidad como una debilidad'', explicaba el experto.
La clave, según Jonathan Benito, es poner en práctica una ''amabilidad asertiva''. ''Ser amable para que no se interprete con una debilidad tiene que ir acompañado de un paquete de asertividad, es decir, tú tienes que tener un paquete de herramientas asertivas para poder hacer valer tus derechos y hacer respetar tus derechos como ser humano'', recalcaba.

Una mujer siendo amable con otra
Tal y como señalaba, hay personas que cuando ven que una persona es amable y cordial, interpretan su forma de ser como una debilidad. ''Intentan atacarte, por muy asertivo que seas, intentan atacarte'', reconocía. ''Entonces con esas personas hay que establecer una especie de coraza y no se puede ser prosocial'', añadía el experto.
Eso sí, el neurocientífico aclaraba que por encima de todo hay que ser educado. ''Eso siempre, pero manteniendo esa distancia'', afirmaba. ''Pueden atacarte o ignorarte, que también es una forma'', apuntaba la presentadora. ''Si, la ignorancia es una forma de violencia muy dura por cierto, o sea una ignorancia no física, pero que hace muchísimo daño a lo más atávico del cerebro'', concluía el especialista.