Fernando Frías Fontes, 24 años, el notario más joven de España: “Salía de casa una vez cada 20 días, solo iba al baño y a beber agua”
Consiguió lo imposible
Nacido en el año 2000, ha tomado la notaría de Cedeira, en A Coruña, una de las plazas más deseadas
Luis Usera con Fernando Frías Fontes, quien con tan solo 24 años se ha convertido en el notario más joven de España.
“Soy un chaval de 24 años”. Así justificaba Fernando Frías Fontes las caras de sorpresa que le ponían los vecinos de Cedeira las primeras veces que debía realizar su trabajo. No es para menos, y es que la imagen que uno tiene de un notario no es precisamente de un joven nacido en el año 2000 y un aspecto que incluso le resta algunos años más.
Sin embargo, el pequeño municipio costero gallego puede presumir de contar con un joven que ha hecho historia, pues es el notario más joven de España al lograr algo que parecía imposible: ser el número uno de su tribunal con la nota más alta en el dictamen práctico, lo que le dio para conseguir la notaría de Cedeira, en A Coruña, una de las plazas más deseadas en España y de la que tomó posesión el pasado 14 de mayo.
Luis Usera con Fernando Frías Fontes, quien con tan solo 24 años se ha convertido en el notario más joven de España.
Frías Fontes es el último invitado de Con P de Podcast, donde ha contado cómo llegó a conseguir lo que él denominó El Plan en solo 21 meses, tras licenciarse en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid. Jornadas de más de 15 horas de estudio diarias y apenas cuatro días libres al año, consiguió romper esquemas en el mundo de las oposiciones.
Una rutina que también implicó cortar con todo, incluyendo las relaciones interpersonales. “Lo que pienso en el momento de hacer esto son tres cosas: primero, creo que puedo hacerlo, tengo que intentar dar el 100% y quiero salir de la vida de la oposición; segundo, he dejado de pasar tiempo de calidad, libre en el sentido con mi familia”, explica Frías. “Lo tercero, nunca he sentido que haya dado el 100% de mis capacidades, quiero intentar hacer algo que pueda inspirar o sea capaz de inspirar a otros, pero sabía que para eso había que sufrir mucho”.
Luis Usera con Fernando Frías Fontes, quien con tan solo 24 años se ha convertido en el notario más joven de España.
Frías agradece tener un círculo de apoyo fuerte. “Tengo muy buenos amigos”, admite. “Son pocos, pero son muy buenos”. Sus padres, aunque separados, también le apoyaron. “Se reían, aunque confiaban. A partir de ahí comenzó un cierre total”.
Desde ese momento, comenzó El Plan. “A partir de ahí, las relaciones sociales son nulas. No salgo de casa, salgo más o menos una vez cada 20 días, a cenar con mi padre de 22:30 a 23:30 horas; y me vuelvo a meter en casa hasta dentro de otros 20 días, ni pisar la calle, nada, metido en mi cuarto.
Fernando Frías Fontes: “En sueños seguía repasando. Soñaba con ello. Abandoné todo por una idea”
El notario cuenta cómo veía la vida pasar a través de su ventana, que da a un patio interior. “Me acuerdo mirar las noches ahí en el balcón, ver cómo la gente hacía su vida. Bajaba las persianas, yo seguía estudiando. Cuando yo me levantaba, la gente subía las persianas, yo ya estaba estudiando”, recuerda.
Frías no vio a nadie en todo ese tiempo, tampoco utilizaba apenas el móvil, solo “diez o 15 minutos por las mañanas” antes de ponerse a estudiar. “Veía a mi familia solo a la hora de comer. Solo salía para beber agua e ir al baño”, confiesa, revelando además que solo comía una vez al día.
Aún así, reconoce su suerte. “Soy un afortunado, porque obviamente se me han puesto unas facilidades que igual otras personas no tienen”, cuenta, haciendo referencia a su madre, que es quien se encarga de las tareas del hogar en su casa. “Si yo hubiera tenido que hacer las labores de la casa, habría perdido un tiempo que probablemente me habría hecho no aprobar”.
En consecuencia, ha conseguido su sueño. Ahora bien, también ha desarrollado acúfenos por el sobreesfuerzo, se le comenzó a caer el pelo, padece dermatitis en momentos de estrés, tuvo que volver a aprender a andar, sufría una gran fatiga y también tiene problemas para relajarse y dormir. “El cuerpo no está preparado para estar estudiando a este nivel tanto tiempo”.