Gdansk, la capital del ámbar y de la lucha obrera

Polonia 

El patrimonio cultural e histórico de la ciudad, situada en el norte del país, pasa con frecuencia desapercibido

Zona histórica de Gdansk, una ventana al pasado

Zona histórica de Gdansk, una ventana al pasado

Nightman

La ciudad de Gdansk es una joya bastante desconocida de Polonia. Los visitantes a menudo se quedan en el sur y en el centro, para visitar las monumentales Cracovia y Varsovia, y olvidan que, en el norte, tocando al mar Báltico, se levanta una ciudad histórica y con un rico patrimonio artístico y cultural.

Su pasado marítimo y comercial, antaño perteneciente a la Liga Hanseática, hace que proliferen palacios, casas de mercaderes, fachadas coloridas, callejuelas medievales, un puerto que parece sacado de un cuento de los hermanos Grimm, tiendas donde venden el omnipresente ámbar y música y teatro en las calles. Todo un conjunto que no tiene nada que envidiar a las ciudades del Sur.

Gdansk ha cambiado de mano muchas veces a lo largo de los siglos, ya sea con invasores o protectores

Gdansk es el epicentro de Pomerania y, como toda la región, ha cambiado de mano muchas veces a lo largo de los siglos, con invasores o protectores que han ido dejando su legado arquitectónico y cultural aún visible y en uso. Su posición estratégica la convirtió en un gran centro mercantil para la Prusia teutona, que la integró en la Liga Hanseática. En esta época medieval la ciudad fue creciendo, aunque la gran prosperidad destacó cuando se aliaron con el monarca polaco y se convirtieron en el centro comercial más importante de Europa Central, con movimiento de mercaderes de todo el mundo.

Ciudad medieval

Todo este pasado medieval se puede disfrutar paseando por las callejuelas adoquinadas, aunque gran parte es en realidad reconstruida, después de la destrucción en la Segunda Guerra Mundial. El centro histórico fue restaurado con mimo y actualmente el visitante puede recrear cómo era la vida hace 300 o 400 años.

La plaza del mercado forma parte del camino real de Gdansk

La plaza del mercado forma parte del camino real de Gdansk

Givaga

El camino Real es la calle por la que desfilaban los reyes polacos en sus visitas. Flanqueada por las fachadas más majestuosas de la ciudad, se accede por la puerta Alta, como parte de las fortificaciones de la ciudad, y adornada con tres escudos de armas: el de Prusia, con unicornios; el de Polonia, con ángeles, y el de Gdansk, con leones. Al lado de esa puerta, la puerta Delantera, del siglo XV, albergaba la prisión y la cámara de torturas. Actualmente, acoge el museo del ámbar, un equipamiento espectacular que permite descubrir la riqueza y la historia del conocido como “oro del Báltico”.

El oro del Báltico

El comercio del ámbar es, de hecho, uno de los factores que más contribuyó al primer crecimiento de la ciudad. Se tiene constancia de su uso desde el neolítico. Esta resina fósil es el producto estrella en todos los comercios de Gdansk, y puede comprarse en todos los tamaños, diseños y precios.

Tienda de ámbar en la calle Mariacka, no se te olvide comprobar la calidad del material

Tienda de ámbar en la calle Mariacka

Lesia; Lesia

Joyas de diversos grados de complejidad se pueden admirar en todos los escaparates. En algunas tiendas venden productos falsos, que son en realidad pedazos de plástico de color dorado, pero los propietarios de tiendas serias enseñan los trucos para detectar si el ámbar es auténtico, básicamente calentándolo ligeramente con un encendedor (debería desprender un olor parecido al incienso) o frotándolo contra la ropa (la electricidad estática que produce basta para atraer pedacitos de papel).

Casas coloridas, cortes históricas

Otra puerta a la ciudad fortificada, la puerta Dorada, es un arco del triunfo ornamentado con alegorías de la paz, la libertad, la riqueza y la fama. Allí da comienzo el entramado de calles y callejuelas donde domina la torre del Ayuntamiento, la más alta de la urbe, con 81 metros de altura y con elementos góticos y renacentistas. Actualmente, es la sede del museo de historia local.

Lee también

La Casa Dorada es la fachada más elaborada de la Gdansk con frisos con esculturas esculpidas que se intercalan con bustos de personajes históricos. Pero la Corte del Rey Arturo, detrás de la fuente de Neptuno, es el edificio más famoso de la localidad. Esta corte se construyó en siglo XIV, y su entrada ya permite adivinar su importancia, con columnas de granito, una bóveda gótica, un vestíbulo decorado con murales de caza y una pintura de la batalla de Grunwald. Los comerciantes medievales usaban el edificio como sede gremial, y allí celebraban tanto reuniones como festejos.

Fue restaurada después de la Segunda Guerra Mundial, y destaca la gran estufa de cerámica que hay en una esquina del salón. Con un tiro de más de 10 metros de altura y cinco niveles, se cree que es la más grande de este tipo en Europa. Está decorada con representaciones de dirigentes, figuras alegóricas y escudos de armas, y tiene 520 azulejos, 437 de ellos originales, ya que durante la guerra la desmontaron y ocultaron, para después reconstruirla con esmero.

La hermosa fuente de Neptuno da la bienvenida a visitantes y locales

La fuente de Neptuno da la bienvenida a visitantes y locales

Getty Images/iStockphoto

Paseo marítimo

Allí cerca, el antiguo mercado central, la Diugi Targ, acoge hoy numerosos locales de comida para turistas y cervecerías con terrazas. Pero si el visitante quiere disfrutar de la gastronomía y el estilo de vida polaco, debe deambular por el paseo marítimo.

En este paseo se concentra toda la animación de la ciudad, y es el lugar para disfrutar de una terraza y de una actuación callejera, para entrar en una galería de arte o alguna tienda de recuerdos, y para sentarse en un acogedor café. El muelle transcurre paralelo al río Motlawa, y era el lugar donde los barcos de vela cargaban y descargaban sus mercancías, que se guardaban en los almacenes de los burgueses o en los graneros del otro lado del río.

Gdansk es conocida por su historia comercial, pasea por las calles alrededor del río Motlawa para empaparte de la atmosfera de la ciudad

Gdansk atesora un rico pasado

Getty Images

Aquí el visitante puede descubrir la cocina de Gdansk, una mezcla de influencias polacas, alemanas y escandinavas. Destacan los pierogi (empanadillas rellenas), el bigos (un estofado de carne y col) y el arenque.

La grúa medieval

De la época medieval quedan numerosas puertas de defensa que protegían las calles que desembocaban a orillas del río, fachadas majestuosas y un monumento único: la grúa medieval. Cuando se construyó, a mediados del siglo XV, servía para cargar grandes pesos en los barcos amarrados en el muelle. El mecanismo estaba formado por dos ruedas gigantes, de cinco metros de diámetro, a modo de polea, con una cuerda atada al eje. 

Este edificio negro situado en Gdańsk es la grúa portuaria medieval más grande y antigua que se conserva en Europa

Este edificio negro situado en Gdansk es la grúa portuaria medieval más grande y antigua que se conserva en Europa

Marc Venema

La grúa se movía con personas que caminaban por el perímetro interior, y podía levantar pesos de hasta 2.000 kilos, lo que la convirtió en la mayor grúa de la época. Posteriormente, se le añadieron más ruedas arriba para instalar mástiles. En la Segunda Guerra Mundial quedó totalmente destruida, pero se reconstruyó fielmente. Hoy alberga una sección del museo marítimo nacional.

La iglesia de Santa María es un enorme templo de ladrillo rojo gótico, y su gran tamaño hace que presida casi cualquier vista de la ciudad. Además de obras de arte valiosas y un interior rico en decoración, destaca el reloj astronómico del siglo XV. Los visitantes también pueden subir a la torre y admirar las vistas desde su pequeño mirador después de subir 405 escalones.

Construcciones como la grúa medieval fueron destruidas durante la II Guerra Mundial y reconstruidas a posteriori

El edificio del gran arsenal es también una joya arquitectónica, así como la capilla real o la iglesia de San Nicolás. Y, por supuesto, pasear por las diferentes callejuelas adoquinadas y admirar los pequeños comercios es un placer para cualquier visitante del casco antiguo.

En agosto, la ciudad celebra la feria de Santo Domingo, el mayor acontecimiento del año. Esta festividad, implantada por los monjes dominicos en 1260, ha acabado extendiéndose por todas las calles donde convergen puestos callejeros de comida, collares hechos de rosquillas dulces, música y teatro en directo para todos los gustos, puestos de artesanía y muchísima animación hacen de estas fechas una interesante opción para visitar la localidad.

La iglesia de Santa María es un edificio de ladrillo rojizo que se alza por encima del barrio antiguo de Gdansk. La basílica es famosa por su impresionante arquitectura gótica

La iglesia de Santa María es un edificio de ladrillo rojizo que se alza por encima del barrio antiguo de Gdansk. La basílica es famosa por su impresionante arquitectura gótica

Getty Images/iStockphoto

Lech Walesa y la lucha por la libertad

La historia más contemporánea también se abre paso para el visitante de Gdansk. Esta ciudad fue la cuna de una de las luchas obreras más destacadas de los últimos tiempos, con el sindicato Solidarnosk (Solidaridad), liderado por Lech Walesa. Walesa era un electricista que encabezó las manifestaciones y las negociaciones posteriores en la gran huelga de los astilleros. Unos años después, se convertiría en el primer presidente surgido de unas elecciones libres en Polonia desde la postguerra y en el premio Nobel de la Paz en 1983.

Memorial de los trabajadores de astilleros caídos, fue inaugurado el 16 de diciembre de 1980

Memorial de los trabajadores de astilleros caídos, fue inaugurado el 16 de diciembre de 1980

Getty Images

El Centro Europeo de Solidaridad está ubicado cerca de los astilleros y es un homenaje a la lucha por la libertad y los derechos humanos. En el interior del edificio moderno se puede ver la exposición Caminos de Libertad, que recoge la historia de los alzamientos de las capitales europeas contra el comunismo y las huelgas de los astilleros Lenin en los años 70 y 80. Se pueden oír los discursos de Walesa con subtítulos, ver el bolígrafo con la imagen del papa Wojtyla (Juan Pablo II) con el que se firmaron los acuerdos de Gdansk o contemplar el tablón de contrachapado donde se presentaron las demandas de los trabajadores de los muelles. 

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...