El verano de manera oficial está a la vuelta de la esquina, pero en muchas ciudades y lugares de España, la sensación estival ya ha llegado antes de tiempo. Las altas temperaturas y el sol han acelerado los métodos a los que recurrimos para sobrevivir al calor.
Respecto a nuestras mascotas, ellas también sufren las consecuencias del verano y, para ello, un adiestrador canino ha querido poner sobre la mesa cómo debemos refrescar a nuestro perro en verano de manera correcta. Y así evitar que pase más calor.
“Si mojas el lomo de tu perro para refrescarlo en verano, podrías estar haciendo que pase todavía más calor. Muchos perros sufren más por el mal cuidado ante el clima que por el clima en sí”, desvela este adiestrado canino.
“Lo correcto sería mojarle la barriga y las patitas”
“Hay razas que en invierno necesitan realmente que les pongamos abrigo, como los galgos y los chihuahuas, pero en los perros con doble capa de pelo podría perjudicar su regulación térmica”, compara el experto.
“En verano pasa lo mismo, hay veces que mojamos la espalda del perro para refrescarlo, pero lo que estamos haciendo es que el agua se quede atrapada en la capa interna del pelo y cuando le da el sol, lo sobrecalienta más. Es como hacer el efecto lupa. Lo correcto sería mojarle la barriga y las patitas”, sentencia.