Pau García-Milà, cofundador de Founderz Business School y reconocido por LinkedIn como Top Voice entre 2022 y 2024, lo tiene claro: la inteligencia artificial ya no es sólo una herramienta profesional o industrial. También puede convertirse en el asistente muy eficaz que reorganiza nuestras rutinas familiares y simplifica decisiones que antes consumían tiempo y energía.
La inteligencia artificial, aliada del hogar moderno

La aplicación experimental Mi lista de compras
García-Milà cuenta en su serie Tecnología en 1 Minuto que ya no necesitamos descargar veinte aplicaciones distintas para organizar nuestra vida. Con la IA, podemos sustituir el 90% de esas apps por una única conversación eficiente. Desde hacer los deberes con los hijos hasta planificar una cena improvisada, los casos de uso son infinitos.
Un ejemplo claro y muy práctico: abrir la nevera, hacer una foto de lo que hay dentro y pedir a la IA que categorice los productos que faltan. Esto, que hace apenas tres años habría parecido ciencia ficción, hoy es posible gracias a avances como Gemini, la IA generativa de Google. La aplicación experimental Mi lista de compras, impulsada por Gemini AI, representa justo eso: la capacidad de automatizar pequeñas decisiones cotidianas. Gracias al reconocimiento de imágenes, basta con apuntar la cámara del móvil a un producto para que este sea identificado, clasificado y añadido a una lista de compra contextualizada, donde incluso se tiene en cuenta el precio y la información nutricional.
Pero hay más. La herramienta también escanea tickets, detecta patrones de gasto, compara precios entre establecimientos y propone recomendaciones para ahorrar sin renunciar a los pequeños placeres. En lugar de usar complejas hojas de Excel o apps con interfaces poco amigables, basta con copiar una lista de gastos en el chat de una IA y pedirle que sugiera cómo optimizar. Lo sorprendente, según cuenta Pau, es que esta herramienta puede recordar conversaciones anteriores y detectar qué gastos son negociables y cuáles no. Esto supone un cambio radical frente a las clásicas apps de presupuestos, que funcionan de forma genérica. La IA, por el contrario, es capaz de aprender del usuario, de sus preferencias, y adaptarse a un estilo de vida personal y dinámico.
Está claro, ya no hay marcha atrás. La Inteligencia Artificial ha llegado a nuestras vidas y hogares para quedarse, ya que soluciona pequeñas complicaciones o tareas que todos tenemos en el día a día. Una manera sencilla de integrar la revolución tecnológica del siglo para toda la familia en cualquier momento.