Podemos apenas ha tardado unas horas en reaccionar al real decreto ley aprobado el martes por el Consejo de Ministros con el que el Ejecutivo asegura imponer un embargo “total” de armas a Israel. La formación morada, que llevaba semanas advirtiendo de que la medida se quedaría en un “embargo fake”, sostiene que el texto no pone fin al comercio ni al tránsito de armamento y constituye “un auténtico coladero para mantener la complicidad con los genocidas”.
Tras analizar el contenido, Podemos ha denunciado que el decreto está plagado de omisiones y excepciones. Entre ellas, destacan la ausencia de limitaciones en las operaciones con filiales de empresas israelíes, la falta de controles sobre el tránsito de material militar por puertos españoles o la posibilidad de que continúe el uso de las bases de Estados Unidos en Rota y Morón para transportar armas con destino a Israel.
El punto más controvertido es la cláusula que permite al Consejo de Ministros autorizar operaciones puntuales cuando existan razones de “interés nacional”. Según explicó el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, esta excepción busca garantizar flexibilidad ante circunstancias imprevistas, al tiempo que el Ejecutivo se compromete a rendir cuentas cada trimestre en el Congreso sobre la aplicación de la medida.
Pero ni para Sumar, como ya dejó ayer claro su portavoz Ernest Urtasun, ni para Podemos, esta salvaguarda es aceptable. La formación de Yolanda Díaz ya ha avanzado que exigirá tramitar el decreto como proyecto de ley para introducir cambios. “Mientras esta cláusula no sea modificada por las Cortes, Sumar se opondrá a cualquier operación que se proponga como excepción al embargo vía Consejo de Ministros”, recalcan fuentes del grupo.
Desde Podemos, Ione Belarra ha puesto en duda la voluntad política del Ejecutivo: “Si de verdad hubiera querido imponer un embargo a Israel, lo habría hecho hace muchísimo tiempo”. La exministra denuncia además que la referencia al “interés general” deja la puerta abierta a la discrecionalidad y permite “seguir actuando de manera arbitraria, como ya sucedía hasta ahora”.
La dirección del partido lamenta que, tras “casi dos años de genocidio”, el Gobierno opte por “confundir a la ciudadanía” en lugar de romper de forma definitiva las relaciones armamentísticas, comerciales y diplomáticas con el Estado israelí.
El decreto, que constituye la medida más simbólica del paquete de sanciones diseñado por Pedro Sánchez para incrementar la presión sobre el gabinete de Beniamin Netanyahu y reforzar la ayuda a la población palestina, llega al Congreso sin garantías de convalidación. Junts mantiene sus reservas y Sumar ya ha advertido de que exigirá cambios sustanciales. Podemos, por su parte, se reafirma en que el decreto no cumple con el compromiso de un embargo real.