Intentar ser como Nostradamus nunca ha sido fácil. Este profeta del siglo XVI hizo predicciones en sus famosas cuartetas que, aunque algunas veces se interpretaron como aciertos, muchas quedaron abiertas a la duda y al simbolismo. Prever el futuro queda demostrado que es complicado, especialmente cuando se trata de anticipar cambios sociales.
Un ejemplo moderno de estas dificultades lo encontró Jorge Amor, un creador de contenido en TikTok. Él compartió un artículo de la revista Quo publicado en el año 2000. Este artículo, titulado Así vivimos en el 2025, intentaba predecir cómo sería la vida en temas como tecnología, medio ambiente, salud y trabajo. Aunque algunas predicciones se cumplieron, otras quedaron muy lejos de hacerse realidad.
El futuro es hoy
Aciertos y errores de hace 25 años
Entre los aciertos de la revista, se destacó que España tendría una “sociedad envejecida”, calculando correctamente que habría nueve millones de personas mayores de 65 años en 2025. También hablaron de avances como las “cirugías menos invasivas” con robots, el “auge del teletrabajo” y medicamentos en parches. Además, acertaron al prever la “televisión de pago” y el aumento de problemas como la ansiedad y la depresión, junto con las dificultades del sistema de salud para atenderlos.
Pero no todas las predicciones fueron correctas. Por ejemplo, no se alcanzó un aumento de 15 años en la esperanza de vida ni se desarrollaron “terapias definitivas para el cáncer”. Ideas como edificios de 1.000 metros de altura o aviones con capacidad para mil pasajeros tampoco se han materializado. Otros errores incluyeron la “criogenización del cuerpo humano” y coches con “visión térmica” que, de momento, siguen siendo ciencia ficción.
Lo que aún falta
Retos y oportunidades para avanzar
Estas reflexiones sobre el pasado ayudan a entender lo que se ha logrado y lo que queda por hacer. Actualmente, acertar en las predicciones es muy complicado debido a la rapidez de los avances tecnológicos, los cambios sociales impredecibles y las interacciones globales cada vez más complejas.
A pesar de ello, como recalcan algunos usuarios “todavía queda tiempo” para que se puedan cumplir algunas de ellas e imaginar el futuro sigue siendo una herramienta esencial para inspirar nuevas ideas y motivar el progreso hacia un mañana mejor.
