Los retrasos en los aviones pueden convertirse en una especie de tortura, sobre todo cuando se alargan varias horas. Hay que estar metidos dentro del aparato sin poder salir, ni siquiera a estirar las piernas o a tomar el aire.
Para amenizar la eterna espera mucha gente lee, se pone con el teléfono o simplemente charla con su acompañante. Sin embargo, en ocasiones especiales puede surgir algo completamente improvisado y maravilloso.
Eso es lo que sucedió en un vuelo con destino a Seattle, EE.UU. Varios intérpretes de jazz, entre los que se encontraban gente como Dave Koz o Marcus Anderson, decidieron montar un concierto para los pasajeros.
“Charlene me preguntó: ‘¿Saben tocar?’ La mayoría de la gente estaba al borde del colapso y esta maravillosa azafata intervino para ver si su grupo quería ofrecer entretenimiento a bordo”, explicó Koz a la cadena de televisión ABC.
Primer concierto en un avión tras más de 40 años tocando
Koz, que lleva más de 40 años como músico, aseguró que “nunca había tocado en un avión”. También aprovechó para mandar un mensaje de frustración sobre las condiciones de los viajes estadounidenses: “Esto realmente conecta con la frustración que todos sentimos ahora mismo al viajar por Estados Unidos, donde uno se siente tan descontrolado y sin saber qué hacer”.