Confiesa que abusó de su nieta y se libra de la cárcel tras pagar 50.000 euros
Agresión sexual
El hombre ha aceptado dos años de cárcel por realizarle tocamientos de forma continuada a la menor que empezaron cuando ella tenía solo 11 años, pero finalmente no deberá ingresar en prisión
El condenado no irá a la cárcel si abona una indemnización a la víctima, de la que ya ha entregado una parte
Un hombre ha aceptado 2 años de cárcel tras confesar haber abusado de su nieta menor de edad que empezaron cuando ella tenía 11 años con tocamientos continuados en sus partes íntimas. Lo ha hecho este jueves en la Audiencia Provincial de Lugo. Sin embargo, acusaciones y la defensa han llegado a un acuerdo por el que el agresor sexual no deberá pisar la cárcel. Así se desprende de la información publicada por El Progreso.
El hombre no tendrá que poner pie en prisión siempre y cuando abone la indemnización acordada para la menor, que asciende a 50.000 euros, de los que ya ha pagado 10.000. Tal y como recoge el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron de forma continuada entre 2020 y 2023. Empezaron en el domicilio del agresor, en A Coruña, y posteriormente se dieron también en otra vivienda de Lugo.
Aprovechándose de su relación de parentesco, el agresor le realizó tocamientos a la menor en diversas ocasiones, desde que ella tenía 11 años. Estas agresiones sexuales terminaron cuando la madre de la niña se enteró de lo que estaba sucediendo en abril de 2023, cuando decidió denunciar a su suegro.
Suspendido
El juicio ha quedado cancelado después de que las partes hayan llegado a un acuerdo
Tras la denuncia, el juzgado interpuso una orden de alejamiento del hombre con su nieta como medida cautelar. Tampoco podía comunicarse con ella por ningún medio. Acusaron al abuelo de un delito continuado de agresión sexual a menor de 16 años, con la agravante de parentesco. Por ello, la Fiscalía de Lugo solicitaba inicialmente una condena de 12 años de prisión para el hombre.
Además, el ministerio público solicitaba también que el acusado no pudiera acercarse a menos de 500 metros de la menor y de su domicilio ni comunicarse con ella durante un plazo de 12 años. Por último, pedía libertad vigilada durante siete años después de que el acusado saliera de la cárcel.
La acusación pedía por su parte también la privación de la patria potestad o la inhabilitación especial para el ejercicio de los derechos de tutela, curatela, guarda o acogimiento de la menor durante ocho años y la inhabilitación especial durante 15 años para cualquier profesión, sea retribuidas o no, que conlleve contacto regular y directo con menores de edad.
Finalmente, las partes han llegado a un acuerdo, por lo que el juicio no ha tenido que celebrarse. El hombre ha reconocido los hechos ante el tribunal y ha pagado 10.000 euros de la indemnización para su nieta. Por ello, las acusaciones han aplicado las atenuantes de confesión tardía y de reparación del daño. Se ha rebajado la petición de pena a dos años de cárcel, ocho años de libertad vigilada, ocho años de alejamiento y doce años sin ejercer profesión o cargo que conlleve contacto con menores. Además, deberá ingresar los 40.000 euros restantes de forma mensual si no quiere ingresar en la cárcel.