Un niño de 8 años ha sufrido una desfiguración de su rostro tras ser atacado con una barra de hierro por tres hermanos menores de edad en una plaza donde celebraba su cumpleaños. El hecho ha ocurrido en Fidene, a las afueras de Roma, en Italia.
De acuerdo con el medio italiano Corriere della Sera, las autoridades investigan la responsabilidad de los padres de los agresores, ya que, por ser menores de edad, no son imputables.
Las lesiones
La víctima deberá someterse a distintas operaciones para la reconstrucción de su rostro
“Oímos un grito en la plaza cuando la fiesta estaba casi terminada. Uno de los niños había sido golpeado y herido con una barra de hierro en la cara por tres muchachos que huyeron a su casa”, ha contado Luigi Pascucci, responsable de la asociación de la plaza Parco delle Magnolie.
Debido a la gravedad de las heridas, los médicos han asegurado que los golpes fueron infligidos con “una violencia deshumana”. El niño fue trasladado al Policlínico Umberto I, donde fue operado por fracturas en el rostro.

El menor deberá someterse a varias operaciones para la reconstrucción de su rostro
El sábado fue dado de alta con un pronóstico reservado, según ha informado el citado medio italiano. Su vida no corre peligro, pero deberá someterse a futuras operaciones para la reconstrucción de su rostro.
Los atacantes han sido identificados como tres hermanos de 7, 9 y 11 años. Pertenecen a familias que residen en la zona, en casas de barrios populares de Serpentara. Los atacantes fueron reconocidos por otros niños presentes en la fiesta a partir de fotos mostradas por la policía. La barra de hierro utilizada fue encontrada y confiscada.

Las autoridades investigan la responsabilidad de los padres de los agresores, ya que, por ser menores, no son imputables
Debido a que los tres agresores son menores de 14 años, legalmente no son imputables según la ley italiana. No obstante, la policía investiga varios aspectos del caso, incluyendo si realmente fueron los tres hermanos, cuál fue el móvil del ataque, y si existe responsabilidad por parte de sus padres.
El III Municipio, a través de su alcalde, Paolo Emilio Marchionne, ha solicitado a los servicios sociales que lleven a cabo verificaciones en el ámbito familiar de los agresores, lo que podría conducir a alguna medida.
Marchionne ha afirmado que el ataque fue un episodio “imponderable”, ya que la plaza es un lugar muy concurrido donde se suelen organizar fiestas infantiles. A pesar de que los residentes han denunciado robos, episodios de agresión como este nunca se habían producido, ha asegurado el alcalde.
Además, ha subrayado que es fundamental “lo que hicieron, que se trató de un gesto grave”, ya que “fue un trauma para todos, en primer lugar para las víctimas, para el niño y sus padres”.