Ana Peleteiro vivió un 2024 lleno de giros y complicaciones, con un gran evento de por medio: los Juegos Olímpicos de París. Tras regresar por todo lo alto en marzo, ganando y obteniendo marca olímpica en el Mundial de Atletismo Indoor de Glasgow, la atleta gallega acabó en sexta posición en la prueba de triple salto. Un resultado que se sumó a la ruptura del vínculo profesional con su entrenador, Iván Pedroso, además de otras instancias.
Doce meses después de su vuelta a la pista, la oriunda de Ribeira ha vuelto llevarse una medalla de oro en triple salto, esta vez en el europeo indoor celebrado en Apeldoorn, Países Bajos. Un metal que ha mostrado orgullosa este lunes en El Hormiguero, el programa nocturno de Antena 3 presentado por Pablo Motos. Sin embargo, este torneo ha llegado en un momento complicado, tal y como ella misma exponía en el plató de la calle Alcalá.

Ana Peleteiro celebrando su triunfo
“Hoy me he tenido que sacar los monstruos de la cabeza. Jamás me he sentido tan baja. Si no llega a ser porque hice terapia hace dos días y por el colchón de personas que tengo a mi alrededor, creo que no hubiese sido posible”, comentaba, desvelando que tuvo que lidiar con “amenazas, coacciones y mil movidas” en los últimos días: “Nunca es plato de buen gusto y duele bastante. La federación está al tanto y es algo que puede salir a la luz o no”.
Ella misma reconocía que tuvo problemas a la hora de visualizar la final y un posible triunfo: “Lo dije al salir en zona mixta. he tenido unos días duros, me he llevado una decepción personal bastante grande. Además he recibido mensajes que decían manipulación. No puedo hablar mucho de eso porque está en manos de mis abogados y es un tema legal. Me llegué a plantear si lo que me estaba pasando era porque no había hecho las cosas bien, o si era el karma de alguna forma”.

Ana Peleteiro en el salto ganador
Muchos giros de guion
“Ha sido un año de muchos cambios y he tenido que leer muchos comentarios duros, muy heavys. No los leo pero al final me gusta interactuar con mis seguidores. Así que al final alguno acabas leyendo. No está mal no solo leer cosas positivas pero escribe mucha gente. A final llega un punto de vulnerabilidad que todos lo seres humanos tenemos y te llegas a replantear muchas cosas. Hay inseguridades pero eso me ha hecho trabajar más fuerte”, reiteraba.
A pesar de reconocer que llegó a plantearse una segunda maternidad “para irme a Galicia y tener una excusa” con la que retirarse del atletismo, la gallega acabó completando 2024 con los grandes cambios sobre la mesa: “Yo tenía un proyecto con Iván, y quería acabarlo. A mí me sabía mal decirle ‘necesito otra cosa, tengo una hija, me voy a hartar del atletismo'”.