Melody iba a ser la invitada de La Revuelta. Estaba cerrado desde hace dos meses, como quien tiene cita con el traumatólogo. Pero este lunes, en el último momento, la cantante se dio de baja emocional tras su decepcionante paso por Eurovisión y su equipo comunicó que, bueno… “se ha enfadado”, en palabras de David Broncano. Resultado: pánico, persianas bajadas, y llamada de emergencia.
Y entonces apareció Manolo Solo. Literalmente, estaba paseando al perro.
“Vivía cerca, estaba maquillado, corrió deprisa”, resumió Broncano entre carcajadas, agradeciendo públicamente al actor su capacidad de improvisación. “Creo que es el día que más tarde hemos llamado a alguien. Esto se empieza a grabar a las 17:30 y a las 17:33 dijo que llegaba en media hora”.
Y llegó. “Siempre me ha dado pánico venir aquí”, reconoció Solo nada más sentarse, mientras intentaban nivelarle el asiento con una copia de la Constitución. “Me he cagado, metafóricamente hablando, claro. Ha sido tan de repente que no me ha dado tiempo ni a tener miedo real”.
De paseo con el perro a leer la Constitución en televisión
Manolo Solo acudió en el último segundo a ‘La Revuelta’ tras la baja de Melody
Aunque lo suyo no era una promo planificada, terminó hablando de Una quinta portuguesa, la película que protagoniza junto a María de Medeiros y que se estrenó hace apenas dos semanas. “No lo haría por cualquier película”, dijo, con esa media sonrisa suya de actor de pocas comedias y muchos Goya.
Entre bromas sobre su perro milleches, el uso excesivo de Instagram y los memes italianos, Manolo se fue soltando. Reconoció que no es gracioso (“ya se nota”), pero que se estaba dejando llevar porque no le había dado tiempo a pensarlo demasiado. Y con ese tono entre despistado y brillante, acabó marcándose una entrevista redonda.
Cuando Broncano le preguntó por el dinero que tenía en el banco, respondió con absoluta transparencia fiscal: “Ha entrado dinero, también ha salido. Muchos altibajos, aunque ahora estoy en un buen momento. No nado en la abundancia, pero nado”.
Y cuando le tocó hablar de sexo —que ya sabemos que aquí no se esquiva—, soltó: “Llevo un petting y con tocamientos autoinfligidos ha habido bastante. Un día sí, otro no. Estoy suelto”, con aplomo y dignidad masturbatoria.
Pero lo mejor estaba por llegar. En un gesto tan surrealista como solemne, y a falta de regalo, Manolo Solo se sacó del bolsillo su DNI —sí, lo lleva siempre encima, por si se lo piden en la puerta— y acabó leyendo en voz alta el artículo 25.1 de la Constitución Española: “Nadie puede ser condenado o sancionado por acciones u omisiones que en el momento de producirse no constituyan delito, falta o infracción administrativa”.
Y por si eso fuera poco, añadió también el artículo 15, ese que habla del derecho a la vida y la integridad física y moral, porque una entrevista de emergencia también puede acabar siendo una clase de ciudadanía.
¿Y Melody? En Dos Hermanas, bajo la manta
Después de quedar 24.ª en Eurovisión, Melody ha pedido parar. Según comunicó RTVE, la artista se desplazó directamente a Málaga tras aterrizar desde Basilea y viajó a su ciudad natal para refugiarse con su hijo, su pareja y su familia. Ha cancelado todos los compromisos previstos, incluida su aparición en La familia de la tele, en las fiestas de San Isidro y en la rueda de prensa del lunes. Ni Diva, ni Apagón, ni La Revuelta. De momento, solo silencio.
“Necesito estar con mi familia y coger fuerzas”, publicó en redes. Broncano fue comprensivo: “Le deseamos que se recoloque un poco emocionalmente”. Y mientras ella se recompone, Manolo Solo se ganó al público con un mestizo de Jack Russell y un gesto que, si no salva Eurovisión, al menos salvó una entrevista.