Paco León es uno de los actores más celebrados de la historia reciente de España. Conocido principalmente por su papel de Luisma en la serie Aída de Telecinco, cuenta con un amplio espectro interpretativo, además de dotes destacadas para la dirección. Carmina o revienta, Carmina y amén, Kiki, el amor se hace, Rainbow y Aída y vuelta forman su catálogo cinematográfico, junto con una dilatada carrera frente a las cámaras de la pequeña y gran pantalla.
Uno equis dos es su último proyecto, una película dirigida por Alberto Utrera que se estrenará el próximo 4 de julio. Basada en una historia real, relata los acontecimientos alrededor de un posible pleno al 15 en la quiniela, y cómo el dinero puede cambiar la vida de dos amigos con pareja que juegan desde la universidad. El sevillano ha acudido al plató de El Hormiguero, el programa nocturno de Antena 3 presentado por Pablo Motos, para dar a conocer los principales detalles.
"Ya está rodada y montada", @pacoleonbarrios ha coescrito y dirigido la película ‘Aida y vuelta’ que se estrenará el 30 de enero de 2026 #PacoLeónEH pic.twitter.com/CRMpo0ZpSE
— El Hormiguero (@El_Hormiguero) June 16, 2025
“No llegan tan al límite como la película. Comienza con una barbacoa, con amigos, una historia de pareja, y acaba como Holocausto Caníbal. De todos los pecados capitales que hay, yo sin duda eliminaría la avaricia. Es la peor”, expresaba León, quien también tuvo la oportunidad de hablar sobre el proyecto que ha generado más expectativa en los últimos meses: Aída y vuelta. El andaluz dirige la adaptación cinematográfica que marca el regreso de la mítica serie.
Al ser preguntado por el de Requena, León marcó los puntos sobre las íes: “Se estrena el próximo 30 de enero. La película está rodada y montada. Yo estoy contento, sólo puedo decir eso, pero no es poco. Cuando me ofrecieron hacerlo, yo avisé: ‘hago lo que me da la gana’. Yo tenía claro que había que utilizarlo para contar otras cosas, porque hacer un capítulo en largo en cine... Siempre he dicho que es como un polvo de ex: apetece, pero no conviene”.
Líneas rojas
El director también destacó la evolución del proyecto original a lo largo de los años, incluyendo su capacidad de jugar siempre frente al precipicio. “Antes, en cada capítulo había denuncias, pero era otra época. A la hora de escribir he sido salvaje, pero atinado. Había que ser salvaje para obedecer al título de la serie. ‘Aída’ no es políticamente correcta. Es uno de los temas: los límites del humor”, aclaraba, ante la atenta mirada del público en el plató de la calle Alcalá.
La vida tras las cámaras, de igual forma, ocupó parte de la conversación con una anécdota sobre sus conocidas celebraciones: “Monté una fiesta en los Premios Goya y los baños estaban fuera. Nadie quería salir y todo el mundo empezó a mear fuera. Eso parecía el círculo de la tristeza. Había una cola esperando… Productores, directores, todos querían pasar. Me decían que estaba Penélope haciendo cola y yo pensando mejor que no entre”.