La megalópolis oriental china de Shanghái inauguró el pasado viernes su nuevo parque Legoland, el más grande del mundo dedicado a los populares bloques de construcción de la juguetera danesa, con más de 75 actividades entre atracciones y espectáculos y hasta 85 millones de piezas de Lego.
El complejo se yergue en una zona rural de las afueras de la ciudad, a unos 52 kilómetros al suroeste de su centro, entre huertos e invernaderos, y presenta ocho áreas temáticas diferentes relacionadas con estos juguetes conocidos a nivel mundial.
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