Fuentes de asociaciones culturales gitanas reconocen que entre este pueblo está muy asentada todavía la idea de los matrimonios precoces. El caso que ha destapado la Guardia Civil, sin embargo, ha hecho saltar todas las alarmas. Unos padres, que ya fueron en su día obligados a casarse muy jóvenes, han sido detenidos por vender a su hija de 14 años y obligarla a casarse con un hombre de 21.
Los padres de la niña y su nueva familia, si se puede llamar así, eran originarios de Rumanía y malviven en España como pueden. Este no es solo un caso para policías, también para sociólogos. Con esta historia se puede elaborar el retrato de la nueva pobreza. La menor fue vendida por 5.000 euros, cinco botellas de whisky y algunos alimentos básicos...
Este caso no es solo para policías: los padres también aceptaron comida por su hija
La Guardia Civil ha detenido en Navarra a los padres de la niña de 14 años, acusados de venderla a otra familia residente en Lleida para que se casara con su hijo de 21 años. Con la colaboración de los Mossos, también han sido detenidos otros dos hombres y una mujer como responsables de la compra y traslado de la menor. A todos se les atribuye un delito de trata de seres humanos con fines de matrimonio forzado.
La menor, que ya ha sido liberada, fue localizada mendigando en la localidad de Les Borges Blanques. Marc Solsona, el alcalde de este municipio, donde residían el matrimonio y los padres del novio, ha asegurado a la agencia Efe que se trata de un “caso aislado” y que el gobierno municipal no tiene conocimiento de “más conductas similares” (de tenerlo, debería presentar denuncia ipso facto ante la Policía).
Los matrimonios forzados
De jugar con muñecas a tener un marido
La peor cara de los matrimonios forzados es la de los matrimonios infantiles. “Parece un contrasentido: matrimonio infantil. Lo realmente infantil es ir a la escuela y jugar”, denuncia la organización Amnistía Internacional. En un matrimonio forzado uno o los dos cónyuges no han dado su consentimiento. También es una unión en la que los contrayentes no pueden romper la relación libremente. En el caso de los matrimonios infantiles ambos conceptos se pueden solapar.
Hay comunidades que celebran bodas en las que el marido y la mujer son criaturas, que vuelven con sus padres hasta que pasen al menos unos años. Pero este problema afecta mucho más a las niñas que a los niños. Un dato así lo avala. Salvo dispensa judicial, la edad mínima para casarse en España son los 18 años. Las bodas de menores de 16 fueron legales en nuestro país hasta el 2015. En 1979 se registró un récord: 2.837 uniones (2.763 fueron niñas, casadas con adultos).
Los hechos se remontan al pasado mes de enero en la localidad navarra de Corella. Los padres de la menor, un hombre y una mujer de 35 años, vendieron a su hija a otra familia residente en Lleida para que contrajera matrimonio con su hijo. El acuerdo de carácter ilícito se cerró por un pago de 5.000 euros, cinco botellas de whisky y algunos alimentos básicos.
La menor, perteneciente a una comunidad romaní, fue trasladada a Catalunya, donde permaneció bajo el control de la familia compradora con el propósito de consumar el matrimonio forzado. La chica, que se encontraba sin escolarizar, fue obligada a ejercer la mendicidad como forma de aportar dinero a la familia compradora, han explicado fuentes de la Guardia Civil.
Una mujer que ejercía la mendicidad con menores
Una denuncia de los Servicios Sociales permitió iniciar una investigación al Equipo Mujer-Menor (Emume) de la Guardia Civil y resultó esencial para identificar a los implicados y conocer el paradero de la menor. En cuanto supieron donde residía, los agentes se coordinaron con los Mossos para que fueran a buscarla en una localidad de Lleida.
Finalmente, el 3 de octubre, la menor fue hallada en Les Borges Blanques y fue trasladada a la comisaría de Mollerussa. Según adelantó el diario Segre y ha podido confirmar esta redacción, un hombre y una mujer se presentaron ante la policía alegando ser los tíos de la menor. Al comprobar las identidades, los investigadores se encontraron con la alerta emitida por la Guardia Civil. Resulta que no solo no eran sus tíos, sino que se trataba en realidad de los compradores, es decir, eran los padres del adulto con quien la casaron. Los agentes llegaron a localizar incluso una publicación en las redes sociales de las personas implicadas con fotografías de la boda.
Los Mossos trasladaron a la menor a un centro de protección, donde ahora recibe atención y apoyo especializado. En Navarra han sido detenidos los padres de la víctima y puestos a disposición del Juzgado de Guardia de Tudela. Por su parte, los Mossos han detenido a otras tres personas, dos hombres de 40 y 20 años y una mujer de 42, implicadas en la compra y traslado de la menor. Han sido puestas a disposición judicial en Lleida.
