Nadal al Port llega a su séptima edición y se amplía hasta el Moll de les Drassanes, sumando 8.000 metros cuadrados más para disfrutar de actividades, paradas, atracciones y sorpresas de lo que ya se ha consolidado como el evento marítimo de las fiestas en la ciudad. Del 28 de noviembre al 6 de enero, barceloneses y visitantes podrán vivir la Navidad más salada en un espacio único, donde la Torre de Jaume I se convertirá en el gran árbol de Navidad del Puerto. El ambiente festivo llega también hasta la plaza del Portal de la Pau, con la fachada del edificio de la Autoridad Portuaria iluminada y una estrella de luz de 17 metros que lucirá en el centro de la plaza.
El Circ Històric Raluy, que este año presenta su espectáculo Terra en el Port Vell, también será el encargado de conducir el acto inaugural de Nadal al Port, con un espectáculo único, lleno de magia, humor y acrobacias, que se llevará a cabo el 28 de noviembre, a las 18.30 h, y que marcará el inicio oficial de este evento con el encendido de luces.
El mar es el protagonista
Un pórtico de 12 metros de altura, realizado con contenedores marítimos, dará la bienvenida a los visitantes a unas Navidades en las que el mar es el protagonista.
Los bautizos de vela –impulsados por la Fundació Barcelona Capital– invitarán al público a subirse a bordo para descubrir la ciudad desde el mar y comprobar que navegar puede ser también una experiencia sostenible, inclusiva y accesible.
Bautizos de vela gratuitos y recorridos nocturnos con una golondrina tematizada son algunas de las novedades de esta edición
Las golondrinas, todo un clásico barcelonés, estrenarán recorridos nocturnos con una embarcación decorada con motivos navideños, música para la ocasión y actores que dinamizarán el viaje. Y para los más curiosos, Salvamento Marítimo abrirá uno de sus barcos, en el Moll de les Drassanes, para explicar cómo es el trabajo de rescate de vidas y protección del mar.
Tampoco faltarán los barcos históricos del Museu Marítim, como el pailebote Santa Eulàlia y el Far Barcelona, abiertos al público. A bordo del pailebote Santa Eulàlia, un buzón real esperará las cartas de los más pequeños, que también podrán visitar la carpa del museo para escribirlas. Y, por tercer año, la embarcación de la ONG Open Arms regresará al muelle para mostrar su labor de salvamento y defensa de los derechos humanos.
La Navidad en el barrio
Crecen, también, las entidades sociales, asociaciones y escuelas locales que llenarán las paradas del Moll de la Fusta con talleres, juegos y actividades pensadas para que los niños puedan aprender sobre la actividad portuaria, la cultura marítima y la economía azul. Una iniciativa que refuerza el vínculo entre el Port de Barcelona, su comunidad portuaria y los barrios de su entorno, consolidando el carácter abierto y participativo de Nadal al Port.
Nadal al Port 2025
Tampoco faltarán los clásicos: la Copa Nadal del Club Natació Barcelona, el Primer Baño del Año, impulsado por el Club Natació Atlètic-Barceloneta, y la regata de Ioles, organizada por el Real Club Marítimo de Barcelona. También espacios emblemáticos del puerto, como el Maremagnum, L’Aquàrium, el Museu d’Història de Catalunya y el World Trade Center, se suman con conciertos y actividades propias. Para los más pequeños, y aquellos no tan pequeños, Fun- Box, el mayor parque hinchable del mundo, vuelve al Pla de Miquel Tarradell. Y, este año, se suman dos nuevas atracciones: Energy y el Árbol de Bolas accesible.
El esperado Tinglado Reial
Los días 3 y 4 de enero, el muelle Oriental se transformará en el centro de operaciones de los Reyes Magos. Los niños podrán entregar sus cartas, participar en talleres y descubrir cómo se organiza la llegada más esperada del año gracias al Port Vell del Port de Barcelona y la Comisión de Fiestas de la Barceloneta. Un trenecito navideño gratuito, ofrecido por Marina Vela, conectará los principales puntos del Port Vell con el Tinglado.
Nadal al Port refuerza un año más su compromiso con la sostenibilidad: materiales reciclados, reducción del consumo energético y gestión responsable de los residuos y el volumen de sonido. Una forma coherente de celebrar una Navidad abierta al mar.
En definitiva, Nadal al Port consolida el Port de Barcelona como una auténtica ciudad portuaria viva, abierta y conectada con la ciudadanía. Un espacio en el que la dimensión económica, cultural, social y sostenible se dan la mano: dinamizando el entorno portuario y, en especial, el Port Vell; acercando la cultura marítima y la actividad del puerto a todos los públicos; visibilizando proyectos de los barrios y las entidades del entorno, y reafirmando el compromiso con la sostenibilidad, a través de una gestión eficiente de la energía, el uso de materiales reciclados o de segundo uso y la reducción del impacto acústico.
