Mujeres imparables: “Estamos viendo la era dorada del deporte femenino en España”
Las nuevas victorias
Aires de cambio llegan a deportes como la F-1, que hasta poco parecía territorio exclusivamente masculino
La tenista Paula Badosa
“Nos dicen que nos gusta la Fórmula 1 solo porque los pilotos son guapos”, protesta Niah, una joven aficionada, “pero no es cierto, a mí me gusta por todo el componente tecnológico, por la estrategia. No es solo un deporte, es más completo”. Ella y su madre esperan expectantes detrás de una cinta negra, frente a la tienda de Adidas en Barcelona, días antes de la carrera del fin de semana del Gran Premio de Montmeló, para ver al piloto de Mercedes, George Russell.
Como ella, muchas otras jóvenes se mezclan entre el público y se camuflan entre una marea de gorras de distintos colores que representan a las escuderías del deporte: el rojo Ferrari, el azul marino de Red Bull, y el naranja papaya de McLaren. Entre todo el público no parece haber distinción de género, solo pasión por la Fórmula 1, un deporte que, hasta no hace tanto, era territorio masculino. Aun así, Niah admite que siente la necesidad de defenderse y de justificarse como fan del deporte, lo que pone en manifiesto cómo las mujeres aún se enfrentan a estereotipos que cuestionan su legitimidad como seguidoras y como deportistas.
El deporte es un “reflejo de la sociedad” y ha sido uno de los espacios donde la reivindicación por la igualdad de género se ha manifestado con mayor claridad, explica María Martín, directora del grupo de investigación en igualdad y deporte de la Universidad Politécnica de Madrid y exgimnasta olímpica. La experta señala que, en los últimos años, la sociedad ha tomado más conciencia de las desigualdades que existen entre mujeres y hombres en el deporte, aunque todavía persisten situaciones “anacrónicas” que continúan reproduciéndose.
“El tractor del cambio lo está siendo el fútbol”, apunta Martín, y señala el 2023 como el año clave cuando las jugadoras de la selección española se convirtieron en las protagonistas. Ha permitido que el deporte femenino gane más terreno y seguidoras fieles. En la misma línea, la exgimnasta explica que el éxito del fútbol ha servido para visibilizar las problemáticas que venían ocurriendo en el deporte desde hacía tiempo. La agresión del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, a la jugadora de la selección española, Jenny Hermoso, fue un episodio que marcó un antes y un después y que, según Martín, permitió ver “la punta del iceberg” de lo que estaba ocurriendo en el deporte.
Concentración en apoyo a Jenni Hermoso
A pesar de que el fútbol sigue teniendo un peso desproporcionado en España (la final de la Eurocopa femenina entre España e Inglaterra ha logrado, de media, de 4,1 millones de espectadores), la experta subraya que se está viviendo “la era dorada del deporte femenino”. Mujeres destacan en disciplinas tradicionalmente masculinas, como el motor, el tenis, y el bádminton, con jugadoras como Cristina Gutiérrez, Paula Badosa, y Carolina Martín. También se mantiene una fuerte presencia en otros deportes en los que las mujeres sí que han tenido mayor representación a lo largo de la historia como la gimnasia rítmica o la natación artística, cuyos equipos españoles han logrado éxitos recientes en ambas disciplinas. Todas ellas ya son referentes para presentes y futuras generaciones.
Y es que la mitad de la población española sigue algún deporte femenino de manera regular y el 84% considera el auge de estas como un “proceso imparable”, según el estudio Romper el círculo de la invisibilidad de las deportistas de élite en los medios de comunicación, que María Martín llevó a cabo junto con David Moscoso, el Instituto de las Mujeres y la Fundación MAPFRE. Asimismo, el estudio Fenómeno fan en el deporte femenino, elaborado por ADESP, Sportnet 4 Women, BRT United y Punto de Fuga, analiza cómo el seguimiento del deporte femenino ha incrementado, especialmente entre mujeres. Además, analizan que ellas lo valoran en especial por su conexión emocional y por los valores que transmite, como la humildad, el compañerismo, la constancia y el esfuerzo. “Es decir, el deporte femenino no es una moda”, sentencia Martín.
Pero, justamente, la cobertura mediática también es uno de los grandes problemas, ya que a menudo “se las presenta primero como mujeres y luego como deportistas”, declara la exgimnasta. En España, existe una escasa y sesgada presencia de ellas en los medios, lo que contribuye a una menor valoración social y económica del deporte femenino, que a su vez también limita el acceso a patrocinios, visibilidad y referentes. “Cuando salen en los medios de comunicación, lo que se está transmitiendo es que lo que hacen tienen valor, que lo hacen muy bien. Esto es positivo para las mujeres de cualquier edad porque es inspirador”, apunta Martín.
Marta García es de las deportistas que más ha desafiado las reglas del juego en la F-1. De pequeña le gustaba subirse a las piernas de su padre mientras fingían que entraban el coche en el garaje. En el momento en el que se subió por primera vez a un kart, sintió que su vida comenzaba. La adrenalina y la velocidad han sido el motor de toda su carrera y, gracias a ello y a su esfuerzo, en 2023 logró convertirse en la primera mujer en ganar la primera edición de la F1 Academy. Aun así, no fue sin haber enseñado los dientes. La piloto de Denia cuenta que, durante mucho tiempo, ha sentido la presión de tener que demostrar que merecía estar donde ha llegado, algo que, según ella, no se les exige de igual forma a los hombres: “Tenía que enseñar que podía ser más agresiva, que podía tener más narices, que podía ser rápida”, declara la piloto.
La opinión de una aficionada
“Así nació mi interés por el deporte”
Niah, una joven aficionada, explica que mostró interés por el deporte a partir de la serie documental de Netflix, Drive to survive, y que fue a partir de ese momento cuando se enganchó junto con su hermana quien, además, quiere dedicarse al mundo del motor. En la misma línea, la actual piloto de Iron Dames, Marta García, destaca que la F1 Academy, la competición de automovilismo femenino fundada por la Fórmula 1, está logrando que las niñas puedan ver las carreras que se emiten por televisión, “y que cada vez hay más chicas que puedan pensar que si hay mujeres, ellas también pueden estar dentro del automovilismo”.
María Martín apunta que persiste una mirada negativa con estereotipos de género en los que se tiende a vincular las conversaciones sobre salud mental con la vulnerabilidad o la emocionalidad, supuestamente femeninas. Remarca que eso logra que ciertos atributos, como el valor o el riesgo, sigan considerándose rasgos masculinos. En ese sentido apunta que es importante desmontar las construcciones sociales: “Ves a Cristina Gutiérrez en el Dakar y dices, ¡ojo! que ellas también son capaces de asumir riesgos”, remarca la exgimnasta. Marta García relata cómo hay momentos en los que siente que se debe verse más masculina para que valoren plenamente sus capacidades como piloto. “Si eres femenina no tiene sentido que vayas tan rápido”, y subraya cómo la feminidad siempre se ha visto más frágil “en un mundo de hombres”, en el que ya desde pequeña debía ganarse el respeto de sus compañeros, declara la piloto valenciana.
Los niños tienen menos miedo a fallar, las niñas son más tímidas”
Celia Ibars es profesora de primaria, jugadora, y entrenadora de equipos de baloncesto en un club de barrio en Barcelona, y comparte una idea similar a partir de las dinámicas que observa en los equipos mixtos que entrena: los niños son “más abiertos y no tienen miedo a fallar”, mientras que las niñas suelen mostrarse “más tímidas”. Es entonces cuando entra en acción el rol de la entrenadora, ya que es esencial transmitirles a las pequeñas jugadoras que “hay que sacar carácter, hay que dejar de estar calladas, que hay que demostrar. Una vez les llega este mensaje, no hay quien las pare”, sentencia Ibars. En el club de barrio de Ibars, a diferencia de las jugadoras infantiles, las adolescentes son las que tienen una dinámica diferente donde buscan competir con el género opuesto: “les da igual el resultado, pero plantan cara”, afirma Ibars.
Por otro lado, Martín destaca la importancia del ámbito educativo como herramienta clave para avanzar en la igualdad efectiva en el deporte, sobre todo entre adolescentes. Explica que la Ley del Deporte de 2022, ya recoge principios de igualdad y coeducación, y que “tenemos la igualdad de derechos”, pero insiste en que ahora el reto es lograr “la igualdad efectiva”. Aunque reconoce que hay profesorado e iniciativas que “lo están haciendo muy bien”, también señala que en la práctica muchas veces estas medidas no se aplican, y que “en los planes de estudio sigue sin aparecer la coeducación”, advierte.
Ibars está convencida: “tenemos que dejar de compararnos con el deporte masculino o medirnos con la misma vara”, declara la profesora. Explica que lo más importante desde el terreno de juego es asegurarse de que las chicas fortalezcan su autoestima en ellas mismas, que sean valientes, y que sigan confiando hasta el final. Marta García está de acuerdo, y le aconsejaría a cualquier mujer joven en el deporte, pero en especial a aquella niña suya interior que se subió por primera vez a un kart, que se escuche a sí misma, que siga su instinto a pesar de lo que le digan los de su alrededor y que, sobre todo, “siga sus sueños”, expresa la piloto.