Parece que congelar el pan está de moda. Recientemente, varias nutricionistas han explicado en vídeos virales en las redes los beneficios de pasar el pan por el congelador antes de consumirlo, sobre todo por las aportaciones en la microbiota intestinal.
También hay estudios que apuntan a que congelar el pan hace que engorde menos, porque su índice glucémico disminuye. Tanto si congelas el pan persiguiendo estos objetivos como si lo haces simplemente porque te resulta práctico en el día a día, existe un paso crucial para que el resultado sea bueno: descongelar correctamente el pan.
Lee tambiénUna dosis de omega-3 al día podría ralentizar el proceso de envejecimiento
Existen varios caminos para llegar a buen puerto, en función del tipo de pan. Por ejemplo las rebanadas (sean de payés o de pan de molde) pueden ir directamente a la tostadora. Si es un tipo de pan blando, como el de Viena, podemos ponerlo directamente en el microondas con la función descongelar.
Ahora bien, ¿qué hacemos con la barra de pan, si no recordamos sacarla con antelación del congelador? ¿O con un pan de tipo rústico, como una hogaza o una chapata? ¿Cómo podemos descongelarlo para que no pierda el toque crujiente por fuera y tierno por dentro?
El pan de barra congelado no nos quedará nada bien si lo ponemos en el microondas.
Peter Reinhart, un prestigioso maestro panadero estadounidense, nos da un buen truco. Lo cuenta en el libro El aprendiz de panadero, y lo recoge el portal especializado Directo al Paladar. Basta con envolver el pan con un paño humedecido con agua caliente y hornearlo a 200 °C entre 5-10 y 30 minutos, según el tamaño de la pieza.
Pero hay una manera muy fácil de acelerar el proceso en el microondas:
- Humedece con agua un paño bien limpio, que no huela a detergente ni deje hilos.
-Coloca el paño sobre el plato giratorio del microondas, y pon el pan congelado encima.
- Enciende el microondas a 750-800 W durante 30 segundos.
- Espera unos instantes antes de sacar el pan del microondas y vigila no quemarte. Consúmelo en el momento.
Lee tambiénEl paso que no deberías saltarte al cocinar con la freidora de aire: “Te aseguras una cocción rápida y uniforme”
Seguramente tendrás que ajustar la potencia o el tiempo en función del tamaño del pan o la composición. Si lo pruebas, seguro que le encuentras enseguida el punto. La idea es que el trapo absorba la humedad que saque el pan congelado, y quede como recién hecho. Evidentemente, el resultado será mejor cuanto mayor calidad tenga el pan.
Este artículo fue publicado originalmente en RAC1.