La pizza napolitana es mundialmente conocida. Los italianos -y especialmente los napolitanos- presumen orgullosos de haber dado al mundo esta creación gastronómica. Y su historia esconde algunos detalles que seguro desconocías.
Si vas a Nápoles, la mayoría de locales tradicionales de pizzas son muy pequeños y estrechos. Los pizzeros -pizzaiolo- trabajan en un espacio muy reducido y, por eso mismo, crearon una jerga secreta para comunicarse entre ellos con los clientes delante.
Para emplear este nuevo lenguaje, combinaron palabras en napolitanos, griego, colores y la smorfia napolitana, un libro que detalla la antigua tradición napolitana en la que los sueños se analizan y se convierten en números para jugar la lotería.
Patrimonio de la humanidad
Un peculiar lenguaje que ha ido traspasando los años y las tradiciones. De hecho, este es uno de los motivos por los que la UNESCO declaró la pizza napolitana en en patrimonio de la humanidad.
”No es solo un plato que esté rico; es historia, cultura y hasta una forma de hablar”, añadía el creador de contenido para cerrar el vídeo.