Hay momentos del año en los que la cocina adquiere un significado especial. En fechas señaladas como la verbena de San Juan, no solo celebramos con fuegos artificiales o encuentros familiares, sino también con recetas que forman parte de nuestra memoria cultural. La coca de San Juan es uno de esos emblemas: dulce, esponjosa, perfumada… un clásico que no puede faltar.
Pero las tradiciones también se pueden adaptar. Porque cocinar no es solo repetir gestos heredados, sino también reinterpretarlos según nuestras necesidades, gustos o lo que nos ofrece la temporada. Desde Fundación Alícia trabajamos para devolver este patrimonio al día a día, entendiendo que las adaptaciones también son una forma de mantenerlo vivo. Esta versión de coca incorpora fruta fresca y de temporada, una alternativa más ligera, colorida y jugosa, que mantiene el espíritu festivo del plato y lo actualiza con ingredientes que tenemos a mano. Una forma deliciosa de celebrar, cuidarnos y seguir haciendo viva nuestra cocina.
Usar productos de temporada no solo mejora el sabor y el valor nutricional de nuestras recetas, sino que también es una manera de apoyar la producción local y de cuidar el entorno. Para esta coca podemos aprovechar las frutas que el inicio del verano nos brinda: melocotones, ciruelas, fresas, cerezas… Todas aportan color, frescura y un toque natural que hace aún más especial este clásico de las fiestas.

Coca Sant Joan
Esta receta propone una masa tradicional y esponjosa. Por encima, en lugar de la clásica fruta confitada, se reparte fruta fresca troceada, frutos secos y un toque de azúcar, consiguiendo una coca más ligera, sabrosa y acorde con el momento del año. Una propuesta sencilla y festiva para compartir en la noche más corta del año.
Coca de Sant Joan
Ingredientes para 4 personas
500 g de harina de fuerza
75 g de azúcar
40 g de Levadura fresca
50 g de mantequilla
3 huevos
200 ml de leche o agua
Ralladura de limón
Fruta fresca de temporada cortada al gusto
Frutos secos picados
Sal
Elaboración
1. Colocar la harina y mezclar con el azúcar, los huevos, la sal, la levadura, la ralladura de limón y la mantequilla con los dedos, añadiendo poco a poco la leche o agua que admita la masa.
2. Amasar la pasta hasta formar una masa homogénea que se despegue de los dedos. Dejar reposar tapada unas 2 horas en un lugar templado.
3. Estirar la masa con el rodillo dándole forma ovalada y un grosor de 1 centímetro. Extenderla sobre una bandeja.
4. Repartir la fruta fresca cortada en trozos por encima, y dejar fermentar la coca a temperatura tibia durante aproximadamente 1 hora.
5. Pintar con un poco de huevo batido y espolvorear con azúcar. Añadir los frutos secos que se deseen por encima. Cocer en el horno a unos 180°C durante 30-40 minutos aproximadamente, hasta que la base esté cocida y la superficie dorada.