Una Barcelona actual y muy femenina convence en la FIL de Guadalajara

La mayor cita editorial del mundo en español

El sector editorial abraza la ciudad durante la feria y aplaude que lleguen nuevas voces traducidas y variedad de relatos

Ambiente frente a la librería del pabellón barcelonés de la FIL de Guadalajara, en México

Ambiente frente a la librería del pabellón barcelonés de la FIL de Guadalajara, en México 

Ignacio Rodríguez

¿Tienen novelas en catalán? El librero Andrés Octavio asiente. Esta podría ser una pregunta normal de no ser porque se hace en México. Concretamente, en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara. El interesado es Luis Jorge Arnau, “descendiente de catalanes y amante del Barça”. No habla la lengua, pero se interesa por ella y elige como compañía a Sergi Pàmies y Gemma Ruiz Palà. Al primero hace tiempo que lo lee por internet –“un gran cuentista, que escribe relajado, como si estuviera en una cantina”–, mientras que a la segunda la acaba de conocer en una charla junto a Elisenda Solsona y Begoña Gómez Urzaiz sobre maternidades singulares. “Quedé cautivado”. 

No es el único, pues estos días Ruiz se convirtió en la autora más vendida en el recinto, junto a Mercè Rodoreda y Montserrat Roig. Puede que sus respectivos homenajes hayan influido en el ranking. O simplemente que los tiempos han cambiado. Sea como sea, son muchos los lectores mexicanos que se han interesado en esta 39.ª edición de la feria, que cierra mañana, por el mundo creativo de la capital catalana en general y por las voces femeninas en particular, a juzgar por lo llenas que estaban la mayoría de las ponencias.

“La oferta barcelonesa que se tenía en México era casi exclusiva de voces masculinas”, informa Chimal

El escritor mexicano Alberto Chimal, que acaba de publicar el libro de relatos Las máquinas enfermas (Páginas de Espuma), donde expresa su preocupación por los avances de la IA, ha comprado estos días novelas de Roig, Carlota Gurt y Marta Orriols. 

“En México podrían llegar a tener un público amplio. La oferta barcelonesa que se tenía acá hasta ahora era casi exclusivamente de hombres”, reflexiona, aunque también valora que se amplíe la oferta de autores masculinos más jóvenes. Eso sí, por poner una pega de la edición, lamenta que “la mayoría de los libros de autores catalanes disponibles en la FIL eran importados y, por lo tanto, tenían un precio prohibitivo para buena parte del público mexicano. Una solución posible sería tener coediciones o tirajes producidos localmente”. 

Ambiente de la FIL de Guadalajara, en México

Ambiente de la FIL de Guadalajara, en México 

Inacio Rodríguez

Antonio Ortuño también cree que eso podría funcionar, pues el interés es máximo, ya que “el sector editorial de Iberoamérica tiene a Barcelona como una de sus capitales principalísimas”, y eso ha provocado que, a lo largo de estos años, diferentes escritores barceloneses, como Eduardo Mendoza o Enrique Vila-Matas, hayan sido invitados a la FIL. Ahora, tal y como añade Arnau, el lector aventajado, “acabamos de descubrir a muchas mujeres que no se habían traducido hasta el momento y que tienen mucho que decir. Las queremos de vuelta”.

“El sector editorial de Iberoamérica tiene a Barcelona como una de sus capitales principalísimas”

El Institut Ramon Llull ha facilitado esta labor y ha permitido que se den a conocer nombres como Irene Pujadas, Alba Dedeu o Fer Rivas. “Ha sido todo un viaje poder traer hasta aquí la novela y dialogar porque, al final, en México, los temas de masculinidad, transición y transexualidad están en otro lugar”, confiesa esta última a este diario tras su paso por Guadalajara con la traducción al castellano por parte de Sexto Piso de Jo era un noi

Los lectores y la industria cultural mexicana parecen abiertos a este y a más debates, pues el turno de preguntas en algunos salones se antojaba infinito, en el más positivo de los sentidos. Mercè Ibarz también ve productivas estas conversaciones, aunque cree que el exilio catalán sigue muy presente en el imaginario. Eso sí: “También interesa la continuidad de este”. Lo que demostraría que la propuesta de conocer la Barcelona actual, comisariada por Anna Guitart, ha encajado entre el público. “Barcelona siempre cuenta los mismos relatos; toca hablar del presente”, apuntó días antes de empezar. “Contamos las maravillas, pero también el problema de la vivienda y del turismo masivo, entre otros temas. No puedes explicar una ciudad sin ser honesto”. 

Lee también

Anna Guitart: “Barcelona siempre cuenta los mismos relatos; toca hablar del presente”

Lara Gómez Ruiz
Anna Guitart, comisaria de la delegación barcelonesa en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara

Las escuelas han sido las primeras en agradecer esta honradez. Xavier Bosch ha sido uno de los autores que se han acercado a un instituto de Guadalajara y ha comprobado que entre los jóvenes también hay interés por estos nuevos relatos. “Ha sido una oportunidad de oro para presentar al mundo que tenemos una literatura de primer nivel” y para “abrirse mercado en Latinoamérica”. 

Una opinión compartida con Daniel Vázquez Sallés, que también visitó un centro y comprobó que, por más kilómetros que nos separen, los afectos pueden ser compartidos. La profesora Natzllely Casillas, que hace más de una década que ve como su instituto participa en esta actividad, bautizada como Ecos de la FIL, asegura que “el nivel de implicación por ambas partes ha sido máximo” y agradece la variedad de literaturas y puntos de vista que se pueden abordar con un programa como el de Barcelona.

Como ya se dejó claro desde el principio, la capital catalana es mucho más que literatura, que boom latinoamericano y que exilio. Era conocimiento y creación. El apartado de ciencia fue igualmente concurrido, así como las artes escénicas, las proyecciones y coloquios de cine y los conciertos. Los que acumularon más colas, dejando a varios grupos fuera, fueron Rigoberta Bandini y Love of Lesbian, aunque estos últimos jugaban con ventaja, pues hace años que incluyen México en sus giras. “Venimos de Chihuahua solo para escucharles”, confesó una pareja que aprovechó el viaje para quedarse más días y escuchar así todas las actuaciones. 

Una predisposición, la de los mexicanos, por aprender que no es fácil de hallar en otros lugares. Eso sí, Guitart y su equipo solo se quedarán satisfechos si, cuando todo termine, los lectores dicen: “Ah, ¿cómo? ¿Pero ya se van?”. El futuro pinta optimista.

Etiquetas
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...