La cruel derrota de este sábado en el Olímpic Lluís Companys ante el Atlético de Madrid (1-2) ha sumido al Barça en una profunda crisis de resultados en la Liga. Una de las peores rachas vividas en los últimos años: el precedente inmediato hay que buscarlo 16 años atrás, en el 2008, en los últimos días de la era Frank Rijkaard en el banquillo.
Malos presagios. Entonces, el Barça, también presidido en aquellos días por Joan Laporta, tuvo un final de temporada deplorable: acabó a 19 puntos del campeón, el Real Madrid, y superado incluso por el Villarreal, a 10 puntos.
Además, el conjunto blaugrana ha igualado su peor racha de derrotas consecutivas en casa, tres, que databa de octubre de 1965. Entonces, el Barça, dirigido por Roque Olsen, perdió ante el Valencia (1-2), el Atlético de Madrid (1-4) y el Zaragoza (0-1).
Racha nefasta
El Barça solo ha sumado 5 de los últimos 21 puntos posibles
Con la derrota ante el Atlético de Madrid, la quinta ya en la Liga y tercera consecutiva en el Olímpic Lluís Companys, el Barça acumula siete partidos con una sola victoria en el campeonato español: desde el 0-4 en el Bernabeu (26 de octubre) y el siguiente 3-1 al Espanyol (3 de noviembre), el conjunto que dirige Hansi Flick solo ha sumado el triunfo en casa del Mallorca (1-5), además de dos empates (2-2 en Vigo y 2-2 en el Villamarín) y cuatro derrotas, tres de ellas en casa (Real Sociedad, 1-0; Las Palmas, 1-2; Leganés, 0-1, y la del Atlético). Es decir, 5 puntos de los últimos 21 posibles.
Para encontrar un precedente similar hay que remontarse a marzo del 2008 con Rijkaard. Una derrota en casa del Atlético de Madrid (4-2) abrió una serie de nueve partidos de pena con cuatro derrotas, cuatro empates y solo una victoria (6-0 contra el Valencia 6-0). Entonces, aquel triunfo solo fue un parche, ya que el equipo blaugrana encadenó ocho partidos con una única victoria.
Rijkaard acabaría siendo despedido a las pocas semanas. El club, por medio de Txiki Begiristain, le comunicó en mayo, horas antes del Clásico, que no seguiría en el banquillo. Ya tenían preparado el relevo de Pep Guardiola, entonces en el Barça B.


