Los Detroit Pistons no se cansan de ganar. El equipo dirigido por J. B Bickerstaff suma diez victorias consecutivas (12-2), igualando su mejor racha de triunfos desde el 2008. Los Pistons superaron la madrugada del lunes al martes por 127-112 a los Indiana Pacers para mantenerse líderes de la Conferencia Este.
Pese a la baja de su mayor estrella, Cade Cunningham, los de Detroit firmaron un partido muy completo con grandes acciones a nivel ofensivo. El jugador más destacado fue el pívot Jalen Duren. El estadounidense firmó uno de los mejores encuentros de su carrera con 31 puntos y 15 rebotes a base de hacerse imparable en la pintura.
Cierto es que delante no estaba el rival más exigente en este inicio de temporada regular, los Pacers (1-13), colistas de la NBA con esta derrota, apenas pusieron en aprietos a los Pistons, llegándose a ver 24 puntos abajo. Pese a los intentos de Paskal Siakam y Bennedict Mathurin, con 29 y 25 puntos respectivamente, los de Carlisle fueron completamente arrollados.
Racha de victorias consecutivas que no se veía desde el 2009
Para ver a los Detroit Pistons ganando diez partidos seguidos hay que echar la vista atrás hasta el 2008. Aquella plantilla estaba liderada por el mítico jugador Allen Iverson. En esa temporada, los Pistons lograron obtener la segunda plaza (59-23) en la Conferencia Este. En su andadura en los Playoff de la NBA, los de Michael Curry, entrenador durante esa temporada, llegaron a las finales de Conferencia, donde acabarían perdiendo por 4-2 ante los Boston Celtics.
Los Detroit Pistons solamente han conseguido una racha de diez partidos consecutivos ganando en 12 ocasiones a lo largo de su historia. La actual plantilla está muy cerca de firmar la mejor racha de triunfos de la franquicia de Detroit, fijada en 13 victorias en el 1990 y el 2004.
Los actuales Pistons han superado en este inicio de temporada el promedio de victorias que los míticos Bad Boys consiguieron en el 1990, año en el que se proclamaron campeones de la NBA. En sus primeros 14 partidos, los Bad Boys tan solo obtuvieron nueve triunfos, tres victorias menos de las doce que ya suma la actual plantilla de Detroit.
Un plan que empieza a tener sus frutos
Dejarse perder en la NBA no siempre conlleva un aspecto negativo. Los equipos con peor promedio de victorias al finalizar la temporada regular optan a tener mejores posiciones en el Draft de la siguiente temporada, donde tienen la opción de poder seleccionar a las mejores promesas.
Esta estrategia, conocida como “tanking”, se podría decir que es la que ha seguido en estos últimos años la franquicia de Detroit. En el 2021, los Pistons acabaron penúltimos de la la NBA con tan solo 20 victorias. En esa temporada obtuvieron la primera plaza para escoger en el Draft de la NBA y su elección fue, nada más y nada menos que Cade Cunningham, actual estrella de la plantilla.
Cade Cunningham en el Draft de la NBA 2021 tras ser seleccionado por los Detroit Pistons
En la siguiente temporada volvieron a repetir la misma posición y escogieron en el Draft a Jaden Ivey en el puesto número cinco de la primera ronda. Hace dos temporadas los Detroit Pistons tocaron fondo. En una reconstrucción con dos décadas de duración, acabaron la temporada con el peor balance de su historia. Y no sólo eso, era uno de los peores de la historia de la NBA con 14 victorias y 68 derrotas.
Ahora, en el 2025, los Pistons han conseguido formar una plantilla con una mezcla de talento joven y veteranía, fusión que les esta permitiendo seguir cosechando victorias y mantenerse líder de la Conferencia Este. Los Pistons buscan volver a participar en los Playoff de la NBA, clasificación que no consiguen desde la temporada 2018-2019.
