Casualmente, van a coincidir en los cines españoles el Frankenstein de Guillermo del Toro y (a partir de mañana) el Drácula de Luc Besson. Vuelven esas criaturas que nunca se van del todo, porque seguimos temiendo lo que la vida artificial nos vaya a deparar y porque tampoco nos abandona el miedo a la muerte.
Hace hoy 50 años, otra muerte traía consigo infinidad de misterios. ¿Sería el fin de Franco el adiós de la dictadura? ¿Existía el riesgo de una nueva guerra civil? En Historia y Vida recuperamos este artículo de Diego Carcedo sobre aquel “día después” que se prolongó tres años hasta que pudimos hablar realmente del paso a la democracia.
Llegada de los restos mortales de Francisco Franco al Valle de los Caídos /
El pasado domingo, Fèlix Badia se ayudaba de expertos como Julián Casanova, Nicolás Sesma, Ignacio Sánchez-Cuenca o Maite Aurrekoetxea para bucear en los porqués del blanqueamiento actual de la dictadura. Hasta tal punto que casi un tercio de los menores de 35 años sienten simpatía por el autoritarismo.
Hay mucho que leer en el especial 20-N publicado hoy con Guayana Guardian. Me quedo con este artículo de Manel Pérez sobre la evolución de nuestro modelo económico desde el franquismo hasta nuestros días, que me ha dado que pensar. Todo lo que los sucesivos gobiernos de la democracia no cambiaron o incluso acentuaron se ha convertido en un lastre que se suma a las dificultades de la desaceleración occidental.
Trump saluda a Mohamed bin Salman a su llegada a la Casa Blanca el 18 de noviembre /
Se cumplen también hoy 80 años del inicio de los juicios de Núremberg (aquí su historia), que fue capital para el establecimiento de una justicia penal internacional. Ante aquellos tribunales, muchos de los encausados dijeron no saber nada del Holocausto, como cuenta Francisco Martínez Hoyos tras la lectura de las charlas que el psiquiatra Leon Goldensohn mantuvo con varios cabecillas nazis.
No es difícil pensar en Donald Trump respondiendo hace unos días a una periodista (el vídeo en inglés) que su invitado, el príncipe Mohamed bin Salman, “no sabía nada” de la ejecución del periodista Jamal Khashoggi en 2018, pese al informe de la CIA que lo situaba al frente de su organización.
En La hora de los depredadores, Giuliano da Empoli dice de Bin Salman que es un personaje “salido directamente de las páginas de Maquiavelo” y lo equipara con César Borgia, también dado a la eliminación de rivales y opositores en la Italia renacentista, como nos explicaba Ana Echeverría. De hecho, Da Empoli lo considera su reencarnación. En medio de un mundo en caos, la fuerza es la única regla del juego. Mal augurio para los defensores de la libertad, que “parecen estar especialmente mal preparados para la tarea que les espera”.
CUATRO COSAS ANTES DE IRNOS (O ALGUNA MÁS)
● Ha llovido mucho desde las 10 pesetas que costaba una caña de cerveza en 1975 y los 2,5 € de 2025. Ramón Álvarez, Anna Belil y Natalia Palazón han comparado en esta narrativa visual lo que éramos con lo que somos a través de las tendencias culturales y los gadgets tecnológicos de cada tiempo.
● “A la Paqui la conocen todas las mujeres en El Corte Inglés. Gastar y gastar”. En un nuevo informe de la UCO se alude así a la esposa de Santos Cerdán. Y el comentario me ha recordado la falta de contención de Jorge IV, que se movía en coordenadas muy diferentes, pero a quien habrían conocido hoy en todas las millas de oro.
● A medio siglo del estreno de Alguien voló sobre el nido del cuco, Enric Ros concluye que aquel manicomio asfixiante retratado en la película no está muy lejos de la Norteamérica de Trump.
● En un entorno de gran incertidumbre, ¿qué haces? En la Inglaterra del siglo XVII como hoy, o rezar o echarte en brazos de un adivino. También podías convertirte en uno y leer el futuro a los demás. En este artículo de History Extra mencionan los métodos para ello, desde comerte el corazón de un topo a dormir con un diente de lobo bajo la almohada. Aunque a lo mejor acababas en la hoguera por brujería.
● El Gran Museo Egipcio apenas se ha estrenado y ya es noticia por algo que no tiene que ver con su colección: el estanque del vestíbulo en el que los visitantes se remojan involuntariamente los pies. Lo comenta El Barroquista en X. Estas cosas a Chaplin no le pasaban.
Volvemos el próximo jueves con más historias.
