Veinte años de la torre Glòries
Veo la torre Glòries cada día desde mi balcón. Escribo mirándola. De noche se vestirá de luces de colores. La llamaron “supositorio”, “falo”... A mí siempre me gustó. Ahora cumple 20 años, y he subido al mirador con su director, Àlex Pratdepàdua, que sostiene que esta torre marca el verdadero centro de Barcelona según la ideó Ildefons Cerdà. La torre Glòries ha albergado esta semana en Barcelona la 36.ª convención de representantes de las torres más altas del mundo, que son a la vez observatorio de la ciudad, miradores, atracciones turísticas y emblema, iconos de cada urbe, y orgullo de los logros de la ingeniería y la arquitectura, de la que Barcelona será capital mundial en el 2026. El sol se pone tras el Tibidabo y desde aquí recorta la silueta de la Sagrada Família.
¿Cuánto mide el Empire State Building?
381 metros.
¿Y la torre Glòries?
144 metros.
¿Qué les hermana?
Ser dos de las grandes torres urbanas del mundo. Compartimos federación.
¿Qué federación?
La World Federation of Great Towers, que se fundó en 1989.
¿Qué torres están federadas?
Las 54 grandes torres más emblemáticas del planeta, repartidas entre 25 países.
Mencione algunas de esas torres.
Empire State Building (Nueva York), torre Glòries (Barcelona), torre Eiffel (París), CN Tower (Toronto), John Hancock Center (Chicago), Space Needle (Seattle), The Shard London Bridge (Londres), Canton Tower (Cantón), Petronas (Kuala Lumpur)...
¿Qué torre es la más alta?
La torre Jalifa (Dubái): 828 metros de altura arquitectónica. Su mirador de observación está en la planta 124, a 452 metros. No será fácil superar esta cota...
¿Qué tienen en común estas torres?
Son maravillas humanas, son alardes de la arquitectura y prodigios de la ingeniería.
¿Para qué se federan?
Para aprender unas de otras y compartir experiencias como atracción con millones de visitantes. Son iconos de su ciudad.
¿Cuántas personas las visitan?
Durante el último año han visitado estas 54 torres repartidas por todo el mundo un total de 44 millones de personas.
¿Qué buscan los millones de visitantes?
Una conexión emocional con esa ciudad. Porque cada alta torre representa íntimamente a su ciudad y la define.
El Empire en particular a Nueva York...
Ha sido elegido la atracción más importante de EE.UU. En el 2023 y 2024, y ese año la más importante del mundo.
¿Por qué nos atraen las alturas?
Porque son un desafío. Y porque nos brindan una visión de conjunto de un lugar. Si viajo a una ciudad, yo busco su punto más alto, para comprenderla cabalmente.
Se encarga del Empire State Building.
Soy presidente de su mirador-observatorio, en el piso 102 en el exterior, y también en la planta 86, en este caso en interior.
Desde tan alto, ¿hasta dónde se divisa?
Hasta cien kilómetros a la redonda, vemos hasta Massachussets.
¿Cuándo lo subió por primera vez?
Era el año 2001. Yo había vivido en Líbano, Puerto Rico... En agosto cité a mi familia, de visita a Nueva York, para subir juntos... Y fue inolvidable.
¿Por qué?
Lloramos de emoción. Cada uno acude a cada una de estas torres con su íntima emoción, con su expectativa, con su historia... Y allí se liberan las emociones.
De niño vi King Kong: el gorila agarrado a la antena del Empire...
El Empire, para usted, va ligado a ese recuerdo, a esa emoción. Disfrútela. El Empire es un icono romántico, para muchos: Algo para recordar... Y otras películas.
¿El rascacielos como atracción?
Las torres son atracciones turísticas, a mucha honra. Y además tótems del alma de su ciudad, e iconos de cultura pop.
Las Torres Gemelas fueron a su vez elegidas como diana...
Cayeron al cabo de un mes de aquella visita con mi familia: el Empire en el 2001 volvía a ser la torre más alta de Nueva York, hasta inaugurarse la torre Freedom.
¿En qué año se construyó el Empire?
En 1931, promovido por General Motors, rivalizando con Chrysler, cuyo rascacielos quedó superado en altura por el Empire mediante la colocación de su antena.
He leído que querían que fuese puerto de dirigibles, zepelines...
Cierto, pero nunca llegó a aplicarse el proyecto: las corrientes de aire convertían en peligrosa aquella idea.
¿Qué le gusta más del Empire State Building, personalmente?
¡Ver amanecer desde el mirador del piso 102! Asciende el sol... Y despierta Nueva York, sus sonidos urbanos... ¡Mi momento favorito del Empire y de Nueva York! A veces practico yoga, hay clase de yoga ahí.
¿Y qué le gusta de la torre Glòries?
Su mirador 360ºen la cúpula, desde luego, y su museo inmersivo (planta -1), donde aprendes que una ciudad la componen muchas criaturas vivientes, no solo los humanos.
Esa torre fue criticada, recuerdo.
Todo debate es parte de la vida ciudadana.
¿El Empire se ilumina también?
Con 16 millones de combinaciones distintas de luces led. Ah, y nuestra electricidad es de origen eólico, ese rascacielos es energéticamente eficiente, partiendo del aislamiento de sus 6.514 ventanas.
