Izas Gastañaga, psiconeuroinmunóloga: “Si necesitas gafas de sol por la mañana, incluso con nubes, puede ser por una alta exposición a luz artificial o por un desajuste circadiano”

BIENESTAR 

La psiconeuroinmunología muestra cómo la exposición a la luz natural puede influir en el equilibrio hormonal, el metabolismo y el bienestar general de nuestro cuerpo

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Izas Gastañaga, psiconeuroinmunóloga: “Si necesitas gafas de sol por la mañana, incluso con nubes, puede ser por una alta exposición a luz artificial o por un desajuste circadiano” 

IURICAZAC

¿Te molesta la luz del sol por la mañana, incluso cuando está nublado? Si alguna vez te has encontrado incómodo al salir a la calle a primera hora del día, incluso si el sol está oculto detrás de las nubes, es más que una simple incomodidad pasajera. Puede ser una señal de que algo no está funcionando correctamente en tu cuerpo. Esa sensibilidad a la luz podría estar relacionada con un desequilibrio más profundo, algo que muchos no consideran, pero que afecta a millones: la sobreexposición a luz artificial. 

Pantallas, bombillas, y LEDs han alterado nuestro reloj biológico de manera sutil pero significativa. Esta disonancia entre la luz natural y la luz artificial puede desencadenar una serie de problemas, como fatiga crónica, hambre constante, y dificultad para mantener un metabolismo eficiente. De hecho, las hormonas juegan un papel clave en este proceso, y su desequilibrio es muchas veces la raíz de estos síntomas.

Lo que realmente necesitas es sol en los ojos, temprano, sin filtros

Izas GastañagaPsiconeuroinmunóloga
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Según ella, el exceso de exposición a luz artificial no solo afecta a nuestra percepción de la luz 

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Izas Gastañaga, psiconeuroinmunóloga, lo explica de manera clara: “Si necesitas gafas de sol por la mañana, incluso cuando el cielo está nublado, es una señal de que tu cuerpo está intoxicado de luz artificial”. Según ella, el exceso de exposición a luz artificial no solo afecta a nuestra percepción de la luz, sino que también altera nuestros ritmos circadianos, nuestro sistema nervioso y nuestras hormonas. “El resultado de esta desincronización es un desequilibrio hormonal, hambre constante, fatiga crónica y dificultad para quemar grasa”. Y no, no se trata de los carbohidratos ni de la genética: “Es la falta de conexión con la luz del sol”

La clave, según Izas, es algo tan simple como la luz natural. “Lo que realmente necesitas es sol en los ojos, temprano, sin filtros,” dice. Esta exposición a la luz del sol por la mañana, incluso cuando el día está nublado, tiene el poder de regular nuestras hormonas, restablecer el metabolismo y mejorar nuestro bienestar general. Y lo mejor de todo: “No necesitas más disciplina. Necesitas sol en los ojos.”

El resultado de esta desincronización es un desequilibrio hormonal

Izas GastañagaPsiconeuroinmunóloga

Este simple gesto de exponer tus ojos a la luz natural por unos minutos cada mañana puede ser un cambio radical para tu salud hormonal. Cuando nos despertamos y nos enfrentamos a la luz del día, incluso si está nublado, nuestro cuerpo recibe una señal para comenzar el día de manera adecuada. “La luz natural regula tus hormonas y le dice a tu cerebro: 'Es de día, activa el sistema'”, cuenta Izas. Al hacerlo, se ajustan procesos clave como la producción de cortisol y melatonina, dos hormonas que son esenciales para tu energía, descanso y equilibrio general. Es más, este simple hábito puede ser la clave para reducir esa sensación constante de hambre y mejorar tu capacidad para quemar grasa, sin necesidad de dietas restrictivas ni un entrenamiento intensivo.

Lo realmente sorprendente es que, en un mundo lleno de pantallas y luz artificial, hemos perdido este contacto tan básico con la naturaleza. No es solo un tema de bienestar físico; se trata de cómo sincronizamos nuestros cuerpos con el entorno. “La luz natural en la mañana restablece tu metabolismo”, dice Izas, “y lo mejor es que es completamente gratuito”. Así que, antes de pensar en otro suplemento o rutina, tal vez solo necesitas una cosa: unos minutos al sol, sin filtros, para que tu cuerpo recupere su ritmo natural. La solución no es más complicado de lo que parece, y los beneficios pueden ser inmediatos.

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“La luz natural en la mañana restablece tu metabolismo”, dice Izas

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Estudios recientes respaldan esta idea y muestran cómo los desajustes en la exposición a la luz pueden tener efectos perjudiciales en la salud humana. En un análisis de la Universidad de Harvard (2018), se destacó que la sobreexposición a la luz artificial durante la noche altera los ritmos circadianos, lo que puede derivar en trastornos metabólicos y mayor sensibilidad a la luz natural por la mañana. De igual forma, investigaciones de la Universidad de Surrey (2009) subrayan la importancia de la luz matutina para restablecer el reloj biológico y mejorar la calidad del sueño.

Otros estudios de la Universidad de Northwestern (2016) muestran que la falta de exposición a luz natural y la exposición irregular a luz artificial aumentan el riesgo de trastornos metabólicos y de ánimo. Estos hallazgos sugieren que la falta de luz solar por la mañana, unida al abuso de luces artificiales durante la noche, puede tener consecuencias directas sobre nuestra salud hormonal y bienestar general.

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