Loading...

Cristina Lora, experta en seguridad y tecnología alimentaria: “Los microorganismos no entienden de cronómetros, si han pasado cinco segundos, uno o siete”

'Hábito Zero'

Según sus palabras, el tipo de suelo en el que se cae y el tipo de alimentos son factores a considerar

Sandra Moñino, nutricionista: “El aceite de coco tiene beneficios antimicrobianos, tomamos una cucharada por la mañana para desinfectar la boca”

Comida derramada en un suelo de madera

Getty Images

La alimentación es un mundo lleno de curiosidades, misterios, descubrimientos y, sobre todo, platos deliciosos. Cada cultura tiene una forma distinta de comer, usando distintos ingredientes y métodos de elaboración. Sin embargo, algunos de ellos podrían comportar algún que otro problema a la hora de consumirlas. Una de las grandes cuestiones es la forma de conservarlos, especialmente si deben permanecer en el frigorífico o el congelador.

Sin embargo, otro elemento que sale a la palestra constantemente es la llamada “regla de los cinco segundos”, una norma no escrita por la que uno puede rescatar un trozo de comida del suelo si no ha pasado más del tiempo indicado. Una sabiduría popular que no suele trasladarse realmente a la realidad. Cristina Lora, experta en seguridad y tecnología alimentaria, estudió la cuestión en el podcast de Hábito Zero.

“La teoría tal cual te dice que los microorganismos no entienden de cronómetros. Una bacteria al final no entiende de ha pasado cinco segundos, no ha pasado uno, siete, no. Al final, en el momento en el que entra en contacto esa superficie con ese alimento, ya hay una contaminación. Pero como tú muy bien has dicho, depende, ¿no?”, exponía. Lora destacó dos características importantes para determinar si un alimento se puede devolver a la boca después de caerse.

Lee también

Carlos Pérez, divulgador científico: “Si te cuesta concentrarte y acabas el día con la mente fundida, no es pereza, es biología; tu cerebro necesita energía y nutrientes para funcionar”

Marc Mestres

“Es decir, incluso yo que soy tecnóloga experta en seguridad alimentaria, yo también hago cosas que dentro de la teoría, bueno, pues intento no siempre cumplirlo, ¿no? Entonces, ¿de qué depende? Como tú has dicho, el suelo, hombre, no es lo mismo que se me caiga en un callejón a que se me caiga en mi casa, que al final controlo la limpieza del suelo. Y es muy importante el tipo de alimento, es decir, si el alimento es seco, esa contaminación no es tan eficaz”, aclaraba.

Puntos esenciales

“Pero si es viscoso o si tiene un alto contenido en agua, sí. Por ejemplo, si se me ha caído un trozo de pan o picos o frutos secos o algún alimento que esté seco, que no tenga un alto contenido en agua, esa transferencia de bacterias no es tan alta. Sin embargo, si se me cae un trozo de carne, de pescado o un trozo de huevo, brócoli, Algo así con un alto contenido en agua sí que es verdad que debería de desecharlo, de tirarlo”, exponía.

Lee también

Helena Rodero, farmacéutica: “El cabello, como la piel, se regenera mejor por la noche y los sérums pueden ser un gran aliado, especialmente si están formulados con niacinamida o pantenol”

Cristina Sierra

Respecto a las congelaciones, Lora aclaraba los posibles fallos que se cometen, por ejemplo al sacar pescado: “Muchas veces digo, venga, mañana me toca salmón. Y lo que hago es que una hora antes me acuerdo. Y lo saco del frigorífico y a lo mejor lo dejo en la ventana porque le da el sol y sé que rápido se va a descongelar o lo dejo encima de la mesa y eso es un error porque al final cuanto más tiempo le des a las bacterias y más agustitos estén porque va subiendo lentamente la temperatura, eso hace que se desarrolle”.